San Isidro (IV): Morante por la PG. La corrida de la Feria: Jandilla, Borja Jiménez, Castella y la rebelión de los “plebeyos. Suma y sigue: Gómez del Pilar, Alejandro Peñaranda…
Pedro J. Cáceres
San Isidro finalizó, con excelente salud, y algunos achaques como las espadas de los toreros y los presidentes que no respetan la mayoría a la hora de conceder orejas.
Lo hizo con festejo extraordinario (Corrida de la Beneficencia) que lo fue por la actuación de Morante, que pasará a la historia por su apoteósica y multitudinaria salida en hombros después de cortar una oreja a cada uno de sus enemigos de Juan Pedro Domecq. Sin duda, ésta, ha sido la feria de Morante que, a sus 25 años de alternativa, ve premio a toda una trayectoria, pese al mal manejo de la espada en su segundo. Lo que da fe de cómo seria su actuación toda la tarde. Festejo en que, otra vez, Fernando Adrián se quedó en puertas de salir en hombros por la espada, cortó una oreja. Y Borja Jiménez, sin opciones con su lote, no pudo repetir su brillantísima actuación ante la gran corrida de Jandilla. El cénit sucedió el jueves 5 de junio. Un corridón de Jandilla, en su término justo de edad y cuajo, trapío. Con hechuras, en tipo. Y dos toros (Vid y Zafio) que se fueron sin su vuelta al ruedo pese a derrochar bravura, exigencia, pero también fijeza, recorrido, duración y nobleza al hacerles las cosas bien. Hubo otro toro, el 2º, que no fue tan completo por exhibir sus virtudes solo por el pitón izquierdo.
Pero “Dios te libre de un toro bravo…”. Y cuando salen esos toros, sus matadores deben de estar, al menos, a la altura: en entrega, disposición, cabeza y concepto. Es lo que sobre el albero venteño desarrollaron respectivamente, y en distintos registros, lógico, cada torero con su personalidad y su bagaje, Borja Jiménez en el tercero (Vid) y Castella (Zafio) en el 4º. La doble PG se cerró por culpa de las espadas: suerte bien ejecutada por Borja, pero con colocación deficiente y la roma de Castella. No hubo localidades en la taquilla.
El día anterior, miércoles, una corrida de Lagunajanda que encubrió en su movilidad, con lo que muchos tragaron, su falta de entrega (pasar continuamente, no es lo mismo que embestir). Con todo y con eso pudo ser más aprovechada por Escribano y Joselito Adame en una tarde en que la frialdad del público pareció hacer mella. Tarde en que confirmaba Alejandro Peñaranda que se mostró como torero capaz y solvente en su disposición y concepto. Por encima del 6º de la tarde pudo cortar oreja que el presidente no concedió y dio una vuelta al ruedo.
En la reanudación de la semana, el martes, un bravísimo Gómez del Pilar pudo arrancar una oreja, por valor, sobriedad y apostura, a una muy dura corrida de Escolar que, como siempre, contó con el favor de la “yihad” en detrimento de los toreros, pero con del Pilar no pudieron. Esaú Fernández estuvo muy por encima de su lote, de no ser por la espada mereció oreja, pero, la verdad, es que no le echaron cuentas. Como a Miguel de Pablo, con el lote más desabrido.
Y entre la Beneficencia y la corrida de la feria (Jandilla) dos corridas huecas, la del Conde de Mayalde y la de Adolfo Martín. Con los condesos, deslucidos, no fue óbice para adivinar que tanto como el confirmante Ismael Martín como, sobre todo, Samuel Navalón piden paso. Y de la de Adolfo, lo más importante fue colgar, una tarde más el NHB, y la cariñosa despedida de San Isidro de Fernando Robleño en una vuelta al ruedo que recordará de por vida. La depurada técnica y la entrega de Ferrera para con los marrajos, pasaron desapercibidas lo mismo que la disposición, raza y valor a prueba de bombas, de Manuel Escribano
Y así está el patio, la Fiesta más viva que nunca, incluido el relevo generacional protagonizado por la numerosa juventud en los tendidos de Las Ventas, a veces un tanto revoltosa pretendiendo desde el 6 ser los herederos del 7 que tan mal ambiente crean muchas tardes.
Los datos de balance en los 27 festejos (incluida Beneficencia) son de cerca de 600.000 espectadores que se rebasarán el próximo domingo en la In Memoria de Victorino (Victorino, Ureña, De Justo, Borja Jiménez). El papel se acabó en los primeros días de venta. Lo que haría el 15º NHB. Todo un récord.
Urtasun y su grey ladran, luego cabalgamos.
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