​La FTL necesita a las figuras más allá de un simple festival

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EDITORIAL (Programa LA DIVSA del 7 de enero de 2019)


Pedro J. Caceres



La FTL necesita a las figuras más allá de un simple festival


Buenas noches y lo primero es desear un gran 2019 para todos, de venturas en lo personal y también en lo taurino.

En España no son menores las dificultades que hay en algunos lugares para dar toros. La Fundación del Toro de Lidia ha lanzado un programa para la recuperación de plazas, especialmente recuperar novilladas en los pueblos.

Está muy bien, pero también la élite, que son las capitales de provincia ayunas de espectáculos, donde poco a poco se ha ido perdiendo tradición taurina necesitan apoyo: la base sí, pero lo que en su día fue cúpula, también es menester rescatarlas.

Son el caso de Baleares y Barcelona que, por una decisión política se prohibieron los toros, para luego restituirlos, teóricamente, una sentencia del Tribunal Constitucional.

Hay otras plazas que, sin estar la tauromaquia prohibida, llevan tiempo sin corridas y estimamos necesario recuperarlas: Vitoria y La Coruña.

Estamos hablando de dos cosos multiusos estos dos últimos, modernos y por lo tanto activos en otros espectáculos, al igual que están en excelente estado de revista los de Barcelona y Baleares, dos joyas arquitectónicas, por el celo de su propiedad.


Estas son asignaturas pendientes que lastran al torero y que la Fundación Toro de Lidia tiene que poner en marcha.

Ya el año pasado, las figuras del toreo –que son los que tienen que tirar del carro- echaron su cuarto a espadas y colaboraron en un festival en Valencia para recaudar fondos para la causa. Pero ese compromiso de las figuras no tiene que ser, sólo, al final de temporada y en un festival, sino, en estos lugares deprimidos, taurinamente hablando, tirar del carro y del público para rescatarlas, ahora que todavía estamos a tiempo.

Y las figuras son las que tienen que comprometerse para ofrecer una o dos corridas de toros para empezar. Y tiene que ser de forma generosa, ya que son ellos los que deben asumir esa responsabilidad porque son los únicos capaces que haga rejuvenecer a la afición taurina.


No es admisible que, a día de hoy Barcelona, Vitoria, Mallorca y La Coruña estén sin toros bien por la mano negra de la Administración o por la falta de compromiso “del toreo”. Conviene recordar que “los toros” no están prohibido en España, antes bien, están amparados por Ley. Y la FTL debe ir a por todas comprometiendo a las figuras, las que tiran del público en general y motivan.


La Fundación, además de una serie de acciones testimoniales, y pasarse media vida, o más, en los juzgados, tiene que empezar a tomar cartas en el asunto.

Hay que hacer un llamado a esas figuras para que salven de la desaparición total a esas cuatro plazas capitales de provincia. 

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