Román y Diego San Román se encargaron de voltear la tarde que se iba metiendo en terreno del aburrimiento. Los cuatro primeros toros de Fuente Ymbro no tuvieron el fondo necesario para seguir hacia adelante, rejándose ellos, sin querer pelea. Menos el tercero, con mayor celo pero sin esa entrega necesaria para que Román terminara de acoplarse con el animal, muy generoso en la distancia larga, pero en corto, cantó la gallina. Con el quinto, de nombre Comisario, Román siguió el mismo planteamiento: distancia larga. Y éste sí que se dió con buena condición. Notable por ambas manos. Y Román corriendo la mano con buen tino a derechas, muy rastrera la muleta, destacando una sensacional. A izquierdas hubo una, también de buena nota. Cerró por bernadinas de infarto. Pichazo y casi entera. Orejas de un notable toro. Ovación para Comisario.
Diego San Román se jugó la vida a puro huevo con el sexto. Tremendo el FY que embestía como un elegante, a media altura y con mucha correa. Toro de duro. Como duro fue San Román para meter al toro en la muleta a izquierdas en tres series de un aplomo, valor y firmeza realmente sensacional. La espada cayó delantera. Buena confirmación del mexicano. Con el primero de estampó ante un muro de mansedumbre, rajado el toro. Curro Díaz fue el peor parado de la tarde. Su lote fue nulo.
Plaza de Toros de Las Ventas. Feria de San Isidro. Lleno. Toros de Fuente Ymbro, bien presentandos. De poco juego a excepción del notable quinto. Duro el sexto.
Curro Díaz, silencio y silencio.
Román, silencio tras aviso y oreja.
Diego San Román, ovación tras aviso y ovación tras aviso.
EL VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO
LA CRÓNICA DE PLAZA 1
Román ha cortado una oreja al buen quinto de Fuente Ymbro en la decimoquinta cita de la Feria de San Isidro celebrada hoy en Las Ventas. Diego San Román, que confirmaba su alternativa, saludó ovación en su lote. Curro Díaz se topó con el lote de menos opciones y fue silenciado en sus labores.
Román y Fuente Ymbro se encontraron de nuevo en Madrid. El quinto, de nombre ‘Comisario’, fue un gran toro en la muleta. Emocionante fue la labor del valenciano, que lo entendió en dos buenas tandas con la diestra cuajadas y rematadas con largo de pecho. Al natural, enganchó la embestida y la llevó hasta el final consiguiendo, también, grandes momentos. Conectó mucho con los tendidos, muy a favor del torero desde los inicios en los medios donde le dio mucha distancia. Unas ajustadisimas y arriesgadas bernadinas pusieron la guinda y, aunque la espada entró al segundo intentó, paseó una oreja. Su primero se apagó pronto.
Diego San Román mostró un buen concepto en el toro de su confirmación. Una faena de mérito y disposición que finalizó en terrenos de cercanías. Tras estocada saludó ovación. En el sexto, un toro nada fácil, tiró de arrojo y mucho valor. Basó su faena al natural y conectó con un público que se entregó a la exposición del mexicano.
LA GALERÍA FOTOGRÁFICA
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