Alejandro Chicharro ratificó la puerta grande del 1 de mayo. Una tarde despejada de ideas, haciendo todo a favor de los novillos en cuanto alturas y distancias. El debe fue la espada, la que antaño no falló y hoy le ha privado de salir a hombros por segunda vez.
Su primero fue protestado, altito y de poco cuajo. El de Guadiara se dio con nobleza, boyante para la muleta, sosito. Chicharro le fue " empujando" poco a poco para macerar una obra, donde las rondas se dieron con la determinación del temple. Las manoletinas ajustadas ponían la obra en una oreja. Pinchazo y estocada en lo alto. Se le pidió la oreja mayoritariamente y no fue atendida. Vuelta al ruedo. El sexto, largo de viga y alto, mostró buen son, pero sin empuje. Chicharro siguió el planteamiento anterior, facturando naturales, de uno en uno, de buen dibujo. Explotó en las distancias a derechas Chicharro al final. Pinchó y con el descabello se atragantó.
Lado de María y Cirugeda pasaron de puntillas por Las Ventas. Lalo de Mario no llegó a conectar en su primero ante la boyante embistada del castaño, con buen son. Al cuarto le faltaron finales, de María dijo poco. Cirugeda sorteó el peor lote, su primero cantó la gallina pronto y el quinto fue deslucido.
Plaza de Toros de Las Ventas. Feria de San Isidro. Más de 3/4 (18.547) . Novillos de Guadaira (1°, 3° y 6°) y Torrehandilla ( 2°bis, 4° bis y 5°), desiguales de presentación. Boyantes los de Guadaira, faltando empuje. Deslucidos los de Torrehandilla.
Lalo de María, silencio y silencio.
Pepe Luis Cirugeda, silencio y silencio.
Alejandro Chicharro, vuelta al ruedo y ovación tras aviso.
EL VÍDEO RESUMEN
LA GALERÍA DE FOTOS DE ALFREDO ARÉVALO
Escribe tu comentario