Sevilla: “La Feria” (II)

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EDITORIAL DEL PROGRAMA LA DIVISA DEL LUNES-MIÉRCLOES 1-3 DE MAYO 2023


Sevilla: “La Feria” (II)

 Pedro J. Cáceres


Así, tal cual, la definió el empresario Ramón Valencia en la presentación ante los medios.

No han comenzado los “farolillos” hasta ayer y podemos barruntar que es “La Feria”.


Este era el encabezamiento del editorial del lunes 24 de abril analizando la prefería con la oreja de Álvaro Lorenzo en el encierro de Santiago Domecq, como la primera e importante tarde de Luque en esa faena de dos orejas a un “Parralejo” de vuelta al ruedo, para, pronto, llegar la primera PP, la de Roca Rey ante un gran toro de Cuvillo, más el extraordinario fin de semana con la corrida ¿quizá la más completa? de Victorino en la espléndida reaparición de “El Cid”, la extraordinaria faena de Emilio de Justo y la cumbre de Escribano a ese hijo de “Cobradiezmos” de vuelta al ruedo. Y así la “pre” concluía con la PP de Guillermo H. Mendoza que la abría por tercer año consecutivo.


Suficiente ¿no? Pero la historia se seguía escribiendo a la luz de “los farolillos” para resumir que hemos asistido a una feria para la historia, y no es cuestión de exagerar, sino de dar fe. Veamos:



El martes fue el día de Talavante reencontrándose consigo mismo y cortar una oreja con una corrida de Domingo Hernández (versión Garcigrande- Justo Hernández) que, salvo el 5º, no dio juego ni opciones a El Juli y Tomás Rufo, que se guardaba para mejor ocasión 48 horas después, como así ocurrió. El calor sofocante ya estaba haciendo estragos en los tendidos y la plaza registro más de tres cuartos, pero no se llenó. Así ocurriría el miércoles y jueves, en medidas distintas, pero siempre sobre los tres cuartos de aforo.


Y llegó el día de hacer historia, para la historia, no solo de Sevilla, sino de la Tauromaquia universal. Basta decir que Morante cortó un rabo, y punto en boca. La sublimación de la tauromaquia total con el capote y muleta, garboso, variado, artista, llevando el peso de la lidia, sentido…y la espada funcionó. La locura y el paseo en hombros una vez traspasada la Puerta del Príncipe, la muchedumbre, con mucha juventud, que lo llevaba como un paso de Semana Santa, lo devolvió al hotel con el tráfico cortado y la gente toreando por la calle.


Fue un tarde sinfónica con el capotee por parte de Morante y Juan Ortega y, también, las pinceladas de Urdiales que ha pasado sin suerte por esta feria. Todo con una corrida muy “torerista” de Domingo Hernández (versión Concha Hernández) en la que el 4º, otra tarde más, fue premiado con la vuelta al ruedo.


Y la tarde del jueves 27, otro hito. Lo protagonizó Tomás Rufo que, pletórico, cortó tres orejas con su correspondiente Puerta del Príncipe. El hito es que un torero tan joven y con tan pocos años de alternativa, abría la puerta soñada por segundo año consecutivo tras hacerlo el año pasado en su debut en La Maestranza. Un buen lote de Jandilla, que esta vez se quedó sin premio de vuelta al ruedo y que puso a Manzanares los puntos sobre las “ies”, peso al esfuerzo en el 4º, y Pablo Aguado, con detalles de toreo natural con capote y muleta, dejaba en alto las expectativas para su próximo compromiso.


El viernes fue día de decepción por el encierro deslucido de Victoriano del Río, sin embargo, fue tarde en Roca Rey se impuso a la mansedumbre y logró cortar dos orejas (1+1) redimiendo, así, a público y aficionados ya que, el reaparecido, Castella y Juan Ortega demostraron que son humanos, no como Roca Rey, capaz de todo, con toros y sin toros.

Y, el sábado, fue el día de Ginés Marín, lúcido y artista, que cortaba dos orejas de su primer toro (“El Torero”). Morante cortaba otra oreja en tarde que no desdijo, por torería y entrega, al día en que cortó el rabo. Completaba la terna Cayetano.


El domingo se esperaba mucho de la corrida de “La Quinta”, que debutaba. Sin embargo, dio poco juego. Pero no fue óbice para que Luque volviera a estar soberbio y cortar una oreja de las que tienen su peso en oro de 24 kilates. El Juli y Aguado estuvieron por debajo de ellos, que no de sus lotes.


Y el broche final, el lunes, aprovechando ser Fiesta Nacional, nunca mejor dicho, lo puso Manuel Escribano que sale lanzado, a pesar del sistema y los empresarios -sálvese el que pueda-, cortando una oreja de mucha ley ante los “Miura” en un mano a mano con Antonio Ferrera, puesto que El Fandi causó baja.


Y, todo, sin un solo percance ¿se puede pedir más? ¿es histórica, o no?.




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