Huevos a la madrileña

EN CORTO Y POR DERECHO (pjc)

Huevos a la madrileña

Hubo un largo tiempo entre mediada la labor de Castella en el 3º y el límite del aviso de L. Simón en el 4º, cuando el francés intentaba desbastar al bruto porque cabía la posibilidad de pulirlo después (por su fondo) y el madrileño demorarse algo en encontrar la tecla que tocar para terminar de acoplarse al toro, ambos tragando -porque la corrida de “El Pilar” no fue fácil-, en el que la taurina “sevyllí” (en la sombra, entre el 2 y el 5) parecía como si fuera a declarar a los dos toreros “personas non gratas" en La Maestranza; como si fueran Danilo en el Bernabéu.

Todo en “modo avión” (murmurando) no se fuera a profanar el silencio D.O. Maestranza, aunque de vez en cuando salía la desagradable voz de un “portacoz”.

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Luego (con el músico en el tipo de la casa de arrancar en cuarta y cuando le parece frenar y dar marcha atrás) “los cojones del de Madrizz” no es que les hiciera abdicar de su chauvinismo sectario y aprobaron, con la boca chica la oreja…aunque en el 6º ya veremos.

En el 5º al “franchute” le fueron minando la moral según su intenso inicio iba perdiendo aire.

Cuando parecía consumarse la venganza en lo que tardó López Simón para ver que su baza era a izquierdas, más en corto y en el tercio, donde el toro pesa más y hay más emoción que toreo, a “los cojones del de Madrizz” le sumó el “palito” y a punto estuvo de salir por la Puerta del Príncipe.

Puso a todos de acuerdo: “el martes ya veremos” (mascullaban)

Más que incorregible, patológico. 

Nota: En  los dos primeros, entre cuchicheos,comadreaban sobre su pobre poder de convocatoria y tuvieron a bien darles los "100 días de gracia" hasta convenir que era un mano a mano inapropiado para Sevilla.

Son los grandes triunfadores, si no los únicos, de la temporada 2015. ¡Agua!