​¡Qué final de temporada! Y Zaragoza, respondió

|

PJC. 3

EDITORIAL PROGRAMA LA DIVISA DEL 17 OCTUBRE

PEDRO J. CÁCERES


¡Qué final de temporada! Y Zaragoza, respondió


 Madrid, 12 octubre. “No hay billetes”. El espectáculo completo: 5 orejas, 2 Puertas Grandes, un buen encierro pese a dos toros devueltos (creaciones Florito) y un toro al corral tras los preceptivos 3 avisos.

La multitud, con impresionante presencia de jóvenes (y “jovenas”), se tiró, con vehemencia, al ruedo; estampa antigua un tanto añorada. El personal salió encantado, ¡vamos!, “toreando por las calles”, despidiéndose, unos de otros, quedando ya para el inicio de la temporada 2023… ¡que promete!

Este broche de brillantes a una muy interesante Feria de Otoño tuvo como protagonista a un joven torero: Francisco de Manuel, que entró, en el cartel estrella del abono, vía “Copa Chenel”, y se entretuvo en cortar 3 orejas sintiendo el calor de un público incondicional ante un “desconocido” torero para la mayoría de las más de 22.000 gentes que abarrotaban el coso venteño.


El sorpresivo triunfo fue tan contundente que ha acaparado todos los titulares dejando en un segundo plano a un irresistible figurón como Roca Rey que, tras una faena de las que hacen afición por emoción y buen toreo, le acompañó por la PG. Incluso dejó en un segundo plano lo más negativo del festejo, el toro al corral que se dejó ir Talavante.


Parecido ocurrió, el mismo día en Sevilla, en el festival de cierre donde un chiquillo hizo historia cortando un rabo, a un becerro. Se llama Marco Pérez y no es la primera, ni la segunda vez, que llama la atención de forma tan rotunda. El damnificado fue Pablo Aguado en la que quizá fuera una de sus mejores faenas de su carrera, cortando dos orejas.


Y Zaragoza respondió como tenía que responder una afición y público sin toros durante dos años, con un abono largo de 11 festejos, en un serial con muy pocas figuras y muchos meritorios. Dio sus 3 novilladas con caballos, que tanto reclamamos en los grandes ciclos y abrió con una novillada sin picadores, que lanza a Fran Fernando, zaragozano él (3 orejas) para renovar ilusiones del pasado con toreros de la tierra que dieron la vuelta a España.


Hubo un “no hay billetes” el día que tenía que haberlo, flojas entradas en las novilladas y corridas de poco reclamo, y suficientes aforos en el resto de los carteles, culminando con el lleno del cierre en que Diego Ventura cortó un rabo (más 4 orejas) poniendo broche artístico adecuado para abonar el terreno en próximas citas.


Quizá el empresario esperaba más en algunos festejos, y los agoreros tras anunciarse la feria, menos.

En el capítulo ganadero fallaron algunas ganaderías y en lo artístico se reivindicó Ferrera, Garrido pidió sitio y Ginés Marín se consolida como uno de los toreros del año (PG) y Morante y Urdiales dejaron su aroma a oreja por coleta.


Todo ello (Madrid y Zaragoza) con presidentes y veterinarios dando por saco. Tiene mérito. Pero de los presidentes, muy malos aficionados, en ambas plazas, y peores policías, hablaremos y escribiremos en la próxima ocasión, porque, si pretenden un protagonismo, este no se lo vamos a dar en La Divisa mientras haya toreros y ganaderos que lo ameritan.

¡Qué final de temporada!


La Fiesta, más viva que nunca ¡Viva La Fiesta nacional! La de los toros, la cultura de la Tauromaquia.


Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.