​Oiga, mire, vea (Cali 2021)

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EDITORIAL (PROGRAMA LA DIVIA DEL 3 ENERO 2022)

PEDRO J. CÁCERES


Oiga, mire, vea


Si huele a caña, tabaco y brea, usted está en Cali, ay, mire, vea.

Si las mujeres son lindas y hermosas, aquí no hay fea, para que vea.

Mi Cali se está adornando para su fiesta más popular, con caña dulce el melao hierve en la paila hasta amanecer.

Habrá corrida de toros y por la noche fiesta y rumba…(Orquesta Guayacan).


Eso y más es Cali, la ciudad que ha vuelto a dar una gran feria taurina, reducida, pero manteniendo los valores que la hicieron ser la “Feria de América” cuando, ante la demanda de público, hubo que habilitar días de corrida por la tarde y en la noche. Ese boom pasó y se cayó en una depresión de calidad de carteles con el lógico descenso de público. Así, hasta llegar la pandemia.


Tras un intento abortado el año pasado, siendo ya concesionario el empresario español Alberto García, pronto se puso a trabajar para recuperar Cali en 2021. Y lo ha conseguido  pese a la negativa del alcalde y otras autoridades que no han podido, por más proclamas que hicieron en favor de la prohibición, al ser la plaza de propiedad privada.


Alberto diseñó una feria muy Tauroemoción”, dimensionada en festejos y figuras las justas (Morante -sustituido por Ferrera- y Roca Rey) pero dotando al ciclo de alicientes tras un estudio de los gustos de la afición para el equilibrio de presupuestos y su sostenibilidad para provocar su continuidad “in crescendo” en próximas ediciones.

Y se la jugó al toro: los encierros de Las Ventas del Espíritu Santo y el debut de Victorino, el gran reclamo de lanzamiento. Y no marró, esas dos tardes fueron las que llevaron más público a Cañaveralejo y, al final, las de mayor éxito en una feria que no ha habido tarde que no se abriera la Puerta Grande. La corrida del maestro César Rincón, con Fandi y Adame en hombros y un toro indultado más la corrida de Victorino, una pica en Cali, con 3 reses de vuelta al ruedo, 2 peticiones de indulto, 4 orejas de Bolívar y 5 y un rabo de Emilio de Justo que en su anterior tarde ya había conquistado Cali cortando 3 orejas a la corrida de Guachicono. Un festejo resentido en su aforo por la ausencia de Morante. Tampoco se cumplieron las expectativas de entrada el día de Roca Rey, pero sí fue de éxito artístico con Ferrera y la despedida de Guerrita Chico con corrida de Caicedo.

En definitiva, una gran feria que pone los cimientos para que, de la mano de un español, Cali en poco tiempo vuelva a ser lo que fue, pese a sus políticos.


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