​¡Pum, petardo! (Comunidad de Madrid)

EDITORIAL (PROGRAMA LA DIVISA DEL 31 AGOSTO 2020)

PEDRO J. CÁCERES

¡Pum, petardo! (Comunidad de Madrid)

“Arreglá, pero informal”.

Así es, y así se está comportando, la Comunidad de Madrid en materia taurina.

Como diría un castizo más informal que la mano de un novio.

“Mu arregla, mu apañá” y ni una mala palabra, pero ni una buena acción.

El petardo que ha pegado con la suspensión de la Feria de Alcalá es de sonrojo para los ciudadanos. Porque sin entrar en el fondo de la proclamada prudencia ante la pandemia (que daría para un debate, entre la demagogia y el cinismo), las formas delatan la verdad de la cuestión: la presión ejercida por el alcalde socialista y las fuerzas anti taurinas.

Blanco y en botella. Si 24 horas antes del comienzo de la feria se dan todos los permisos y bendiciones no es de recibo que en unas pocas horas se inste a la tal prudencia (que no es una concejala de Podemos), se suspenda la feria y deja en papel higiénico su propia “prudencia” cuando publicó el protocolo de actuación para poder dar toros.

El alcalde pidió un informe a Sanidad y estos no tuvieron la decencia de acercarse a la plaza a ver como se estaba cumpliendo (o, no) el protocolo.

En el colmo del desahogo la empresa se entera antes por la prensa que por el comunicada oficial, por supuesto con nocturnidad y alevosía como ya hicieran con el festejo de Miraflores.

Esta suspensión “exprés” supone daños morales a empresarios, plantilla, cuerpos de desinfección y seguridad, toreros, ganaderos y aficionados. Y grandes daños económicos a los empresarios por la inversión realizada (la normal de cualquier festejo y la extra por la situación sanitaria) más el lucro cesante, si lo hubiere.

Supongo que todos estos perjuicios tienen recorrido judicial, pero en el caso que la empresa lo ganara será otro daño colateral para el ciudadano, porque ésta juerga ¿quién la paga? Ustedes y yo, no se piensen que va a salir del bolsillo de estos imprudentes, imprudentas, que cínicamente invocan la prudencia.

Una prudencia que parece no preocuparles en otras manifestaciones que se siguen celebrando como conciertos, folklore y masificaciones como el transporte público etc.

Y no es cuestión del “y tu menos” respecto de los toros y que se suspendan otras actividades, no; porque “mal de muchos, es epidemia, no el consuelo de los tontos, que los taurinos no lo somos.

Sólo se pide un poquito de coherencia entre las soflamas propagandísticas y las sibilinas acciones.

¿quién dijo lo de: política, “porca miseria”?  Un genio, sin duda.