​Alejandro Marcos: " Todo lo que habíamos trabajado durante tanto tiempo salió en la corrida de Galache."

Alejandro Marcos: " Todo lo que habíamos trabajado durante tanto tiempo salió en la corrida de Galache."

" Me quedo con esa tarde por la relevancia que tuvo, pero también ha habido tardes muy importantes."

" Es una ganadería muy distinta, hay que torear muy despacio y dejando la muleta muerta."

“Si que veía, con muchas posibilidades, que la empresa intentara mi contratación y no me pilló de sorpresa, cuando me llamaron."

LA ENTREVISTA DE ALEJANDRO M-CARBIAS

Hablábamos con Alejandro Marcos antes de la corrida de Galache, con Morante y El Juli en el cartel, se mostraba muy ilusionado. Dos meses más tarde hablamos con él.

Muy buena la corrida de Galache. Personalmente, estuve en la plaza y vi un torero muy hecho y un torero que va a dar que hablar.

Me alegro de que te divirtieras y que vieras, pues, la dimensión que intenté dar. Fue una tarde muy especial y que todo lo que habíamos trabajado, durante tanto tiempo, salió en mi tierra, que era lo que lo que quería y lo que deseaba.

¿Podemos decir que la tarde más importante de Alejandro Marcos?

Bueno, no sé, al final fue una tarde diferente, por lo que la rodeó y por el ambiente que se vivió en la plaza y la expectación que tenía. Quizá, en ese sentido sí, pero bueno, ha habido otras tardes de esa altura en la temporada. También es verdad que me quedo con ella por la relevancia que tiene, pero ha habido tardes también muy buenas.

¿Cómo se torea un Galache, Alejandro?

Es una ganadería muy distinta que embiste muy despacio y hay que aplicarla mucha suavidad. Eso es lo que intenté hacer y por un momento se consiguió. Al final, es dejarle la muleta muerta e intentar tirar de ellos, cuanto más despacio mejor, y sobre todo llevarlo muy pegaditos a la muleta para que ellos cojan ese ritmo especial que tienen.

La afición estuvo contigo y además hacía falta ya en Salamanca un torero que rompiera o que generara una nueva ilusión. Eso te motivó y de cara al año que viene te fortalece como torero.

Sí, mi objetivo es ser un referente aquí en mi tierra, Salamanca. Creo que es algo bonito y es el principio de algo que ansiaba, que deseaba y ojalá se acabe cumpliendo.

Y con el triunfo, llegó la sustitución de Pablo Aguado, ¿cómo viviste esa tarde?

Fue una tarde importante, de mucha responsabilidad, porque, al final, el día anterior había habido triunfo y uno quiere repetirlo. También, sabes que es una apuesta. Pero bueno, creo que los toreros estamos para torear, para apostar y más en nuestra tierra. Entonces, con la lógica presión y responsabilidad, pero con la ilusión de que pudieras hacer las cosas bien.

¿Te esperabas que sonase el teléfono, Alejandro?

Es algo que no me lo esperaba porque tampoco sabía la decisión de Pablo. Pero, cuando ocurrió lo que ocurrió, pues sí que veía con muchas posibilidades de que la empresa intentara mi contratación. Y bueno, no me pilló de sorpresa.

¿Al año que viene confirmarás la alternativa en Madrid o de momento no hay nada?

Son cosas que no me competen. Es cuestión de mis apoderados. Yo, al final, me dedico a entrenar y a mejorar día a día, ir al campo y estar preparado. Yo creo que es pronto para tener ese tipo de contacto.