El valor del francés está fuera de toda duda, igual que su capacidad para imponerse a los toros, por muy áspero que sea su fondo. Sin embargo, su sentido natural del temple y su perfecta colocación le han llevado a ser uno de los toreros que mejor interpreta cuando se alía con la suavidad. La madurez que le dan sus casi dos décadas de alternativa es una garantía de ver siempre cosas atractivas.
Escribe tu comentario