Se celebró la esperada corrida de toros entre el rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza y el diestro de a pie Diego Silveti

Silveti corta una oreja en el mano a mano con Hermoso en Salamanca, México

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EMILIO MÉNDEZ


Se celebró la esperada corrida de toros entre el rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza y el diestro de a pie Diego Silveti. Resultó éste último triunfador del festejo al cortarle al toro que cerró plaza una oreja para salvar así la tarde. Su compañero de cartel no anduvo atinado con el rejón mortal y sólo se le aplaudió en su lote.

Previos cuadros de bailables folklóricos en el ruedo de la plaza y ante un lleno en el coso desmontable ubicado en las instalaciones de la feria en tarde de gran ambiente y buen clima, se lidiaron seis toros de la dehesa regional de Marrón, siendo tres de ellos para rejones, uno complicado, otro de regular juego y muy bueno, el tercero. Y tres más para la lidia a pie, de los cuales el primero se lastimó una pata, el otro se acabó pronto y el último evidenció bravura y calidad en su embestida.


El rejoneador estellés Pablo Hermoso de Mendoza en el primer astado que le tocó lidiar, llamado “Costurero”, soso y muy agarrado al piso, dando poco juego, se mostró más que dispuesto, con ganas de agradar. Colocó dos rejones de castigo, banderillas sin lograr lucimiento por el poco recorrido del burel y terminó clavando dos cortas y una rosa. Falló al matar y se le aplaudió el esfuerzo. En su segundo, que tuvo calidad y que fue de más a menos, Hermoso de Mendoza le cuajó una faena con personalidad, dejando dos rejones de castigo, banderillas al cambio, los palos cortos, no acertó al matar y al final se le aplaudió.


A su tercero, un buen toro, Pablo le realizó una faena importante al llevar a cabo todas las suertes, colocando los rejones de castigo, las banderillas al cambio, siempre saliendo delante de la cara del astado para hacer sus espectaculares giros en la cara que le fueron muy ovacionados. Clavó palitroques cortos y un par de banderillas largas a dos manos pero al final marró con el rejón de muerte para hacerse aplaudir finalmente.


A pie, Diego Silveti en el primer toro de su lote, “Tigrillo”, lanceó alegremente por verónicas y realizó un vistoso quite por mandiles y chicuelinas. En el tercio de banderillas el burel se lastimó una pata y en la muleta, a pesar de la nobleza y calidad que acusó si le costó trabajo embestir, por lo que Diego hizo el esfuerzo, logrando algunos pases meritorios y adornos para matar de estocada y descabello siendo aplaudido. En su segundo, Diego se lució con el capote pero el toro se vino a menos muy rápido y con la sarga, ya sin fuerza, no le dio opción a su lidiador, quien lo intentó en todo momento pero sin lograr nada destacable y al final la gente aplaudió la disposición de Silveti.


Y en el que cerró plaza, bravo y con calidad, Diego salvó la tarde al cuajar buenos momentos con el capote y con la franela ejecutar una faena con el sello de la casa, destacando algunos buenos muletazos, haciendo el toreo con quietud y estética. Mató hasta el segundo viaje de estocada, además de descabellar, para que a petición general se le concediera una oreja.


FICHA DEL FESTEJO

SALAMANCA, Guanajuato. Coso desmontable ubicado en el recinto ferial. Entrada: Lleno en tarde de agradable clima.

Seis toros de Marrón, tres de ellos para rejones, siendo uno complicado, otro regular y uno muy bueno. Y tres para la lidia a pie, resultando uno lesionado de una pata, otro que se acabó pronto y el que cerró plaza fue bravo y con calidad.

El rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza: Palmas, palmas y palmas

Diego Silveti: Palmas, palmas y una oreja.

Foto: Emilio Méndez


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