María Sara" El toro no hace diferencia entre una mujer y un hombre. Así que la competencia es igual, es la misma plaza, con los mismos toros".

|

Maria sara. avance taurino


María Sara" El toro no hace diferencia entre una mujer y un hombre. Así que la competencia es igual, es la misma plaza, con los mismos toros".


Pues fue increíble, la verdad que pude vivir un sueño porque todo lo que soñaba de pequeña lo he conseguido más o menos

Siempre uno quiere más, pero me quedo con todo lo que he vivido que ha sido fantástico.


Cuando empecé a montar a caballo soñaba con poder hacer una carrera de rejoneadora de  alto nivel en  plazas importantes.

He tenido mucha suerte porque yo creo que cuando uno se encuentra con una mujer y demuestra su profesionalidad  y sus ganas de trabajar, su actitud, pues al final los compañeros te ven como uno más, como uno de ellos.

 La tauromaquia es una escena de la vida que es de verdad, que se jura uno la vida y  para mí era más importante que el teatro y yo creo que es un poquito por eso que he llegado hasta la tauromaquia sobre todo cuando vi una corrida de caballos, de rejones en La Camarga, a partir de ahí quise dedicar mi vida a eso.


Pues yo creo que  torear en público es lo más bonito,  ser rejoneadora, porque son momentos de emoción intensa y cuando ves la plaza llena, te sale el toro y  triunfes o no, pero es muy bonito, es muy  bonito esos viajes con tu equipo y torear es lo más bonito de todo.



LA ENTREVISTA DE ROSI FERNÁNDEZ


Esta semana entrevistamos a  una mujer con personalidad. Ha sido ganadera, empresaria, comentarista, apoderada y rejoneadora. María Sara.


Naciste en una familia dedicada al teatro y dejaste el escenario por otro escenario mayor, la plaza de toros. ¿Cómo fue la decisión de dedicarte al mundo del toro, de ser rejoneadora?


Es increíble, porque yo he vivido toda mi juventud en una familia muy artista, muy intelectual, vivía en París, en los teatros, en la Ópera, pero la tauromaquia es una escena de la vida que es de verdad, que se juega uno la vida y  para mí era más importante que el teatro. Cuando vi una corrida de caballos, de rejones en La Camarga, quise dedicar mi vida a eso.


 ¿Si echamos la vista atrás, cómo recuerdas esos momentos de triunfo?


Fue increíble, pude vivir un sueño, porque todo lo que soñaba de pequeña lo he conseguido más o menos. Fue muy bonito y  la ilusión que te da la vida, el valor que te da, la visión que uno puede tener y sobre todo un poco la locura. Pero es creer en lo que quieres en la vida y soñar, tener una vida diferente. Y yo creo que es lo más bonito:  ser artista y  creer que el destino es otra cosa que la normalidad.


Tomaste la alternativa en el 1991 en Nimes, apadrinada además por la rejoneadora peruana Conchita Cintrón. ¿Fueron difíciles esos momentos de comienzo por ser mujer?


No, yo he tenido mucha suerte porque yo creo que, cuando uno se encuentra con una mujer y demuestra su profesionalidad  y sus ganas de trabajar, su actitud, al final los compañeros te ven como uno más, como uno de ellos. Y ahí la competencia es la misma. El toro  no hace diferencia entre una mujer y un hombre. Así que la competencia es igual, es la misma plaza, con los mismos toros. Y eso es muy importante. Y tuve   mucha ayuda  profesional, de los taurinos y del mundo del caballo y no he tenido problema, pero fue muy difícil  empezar de cero porque cuando no eres de una familia de tauromaquia,  hay que luchar y hay  que trabajar mucho.


En 1994 confirmas en Las Ventas y te retiras en el 2007. ¿Cómo fueron esos años? ¿ Tus sueños los cumpliste o te quedó algo pendiente en tu carrera?


 No, siempre uno quiere hacer más. Yo no me arrepiento de nada,  creo que he tenido mucha suerte, he hecho lo que he podido, lo mejor que podía con mis mejores y peores momentos, pero he hecho una carrera grande y he soñado en muchas plazas. He toreado en España, en Portugal, en Colombia, en Venezuela, en Méjico y en Francia muchísimo. Siempre uno quiere más, pero me quedo con todo lo que he vivido que ha sido fantástico.


Cuando comenzabas a montar a caballo. ¿Soñaste alguna vez lo que después alcanzaste?


Sí. Cuando empecé a montar a caballo, soñaba con poder hacer una carrera de rejoneadora de  alto nivel en  plazas importantes. No tenía ni un caballo  ni una cuadra. Era un sueño. Poco a poco, con el trabajo, la paciencia y sobre todo la afición, he conseguido  todo lo que había soñado, así que puedo decir que soy feliz.


Como hemos dicho al principio, has hecho de todo, ¿Cuál es la mejor, la peor, la más difícil y la que volverías a repetir?


Pues yo creo que  torear en público es lo más bonito,  ser rejoneadora, porque son momentos de emoción intensa y cuando ves la plaza llena, te sale el toro y  triunfes o no, pero es muy bonito, es muy  bonito esos viajes con tu equipo y torear es lo más bonito de todo.


Eres madre de la Lalo Lambert. Conocido como Lalo de María, que es novillero. ¿Cómo vives esa etapa  como madre?


 Imagínate lo que puedo sufrir. Porque yo sé lo que es, y con él tengo  angustia, miedo, no sé explicarlo.  Pero, estoy muy contenta porque él tiene ambición y tiene también un sueño para su vida. Quiere ser torero, quiere ser figura y yo lo voy a ayudar en todo lo que pueda, no tengo más remedio que ayudarlo y apoyarlo como madre y como profesional. Si el no tuviese aptitudes, pues no le dejaría seguir para no perder tiempo, pero gracias a Dios  tiene personalidad, tiene valor y ahora lo que le falta es torear y tener oficio, hacerse poco a poco, con mucho trabajo y mucha suerte también. Y si él tiene capacidad de llegar alto yo le voy a ayudar.


¿Por qué hay tan pocas rejoneadoras?


 Porque es muy difícil. Hay muy pocas mujeres quitando a Lea Vicens, que está haciendo  una carrera de figura. Hay poca mujer rejoneadora y también poco hombre nuevo rejoneador. Se necesita para tener las cuadras mucho trabajo y mucho dinero. Es muy complicado y por eso creo que hay pocas mujeres.


¿Qué diferencias ves entre Francia y España?



Es complicado porque todos los   países son diferentes y hay cosas buenas en todos los sitios. En Francia, a lo mejor, tienen mucho respeto, pero son también un poquito más difíciles, en España hay más alegría. Yo me he sentido bien en todos los sitios y la verdad  que siendo francesa tenía más presión en Francia. Porque es tu país y uno quiere siempre triunfar. Pero, en España me encanta la afición y la alegría que hay en las plazas de toros.



Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.