Maxime Solera: Triunfador en Arles en su alternativa cambió Roland Garrós por Les Arenes

Maxime Solera: Triunfador en Arles en su alternativa cambió Roland Garrós por Les Arenes

Era la cuarta intentona de tomar la alternativa por causa de la pandemia,una de ellas era con la corrida de Miura, pero al final, no hay mal que por bien no venga, y ha sido una bendición esta alternativa en Arles con una gran corrida de La Quinta y tener como padrino a Morante y Aguado como testigo es un lujo.

Es muy bueno para Francia y para el toreo la competitividd que se va a dar de ahora en adelante con la buena plantilla de toreros franceses, que ,a demás son novedad.

Yo soy francés pero tmbien de aquí. Cierto es que empecé en la escuela de Arles y luego en la de Nimes, pero para torear me vine  a Barcelona, donde vivo, y después tuve el apoyo de su Escuela y luego en mi andadura como novillero, y espero que siga siendo sí , ahora de matador de toros.

Es cierto que he disputado muchos buenos torneos de tenis con muchoss tirunfos, pero el toro me tiraba siempre y cuando tuve que elegir no tuve duda: el toro por la raqueta.

LA ENTREVISTA

ENTREVISTA   A MAXIME SOLERA

 Arles cuenta con un torero más, un matador de alternativa que, además, en el día de su doctorado se entretuvo en salir por la puerta grande. Hablamos de Maxime Solera.

Enhorabuena Maxime.

Muchísimas gracias.

 Franco-catalán, franco-español,  catalán o francés, hispano-francés, nacido al lado de un pueblecito de Arles, criado en la escuela de Nimes y  desde hace ya bastantes años, vives en Castelldefels. ¿Así que cómo te definiríamos?

Me defino de todas estas zonas y, por supuesto,  soy  francés, he crecido  al lado de Arles.  Empecé en la escuela de Arles y todo empezó allí. Pero, bueno, es verdad que después de una breve etapa en la escuela de Nimes me fui a Cataluña para ser torero y aquí llevo  cinco años muy a gusto, muy arropado  por la afición catalana que sigue estando  muy viva. Y tengo la suerte de tener   aficionados, tanto de Francia como de Cataluña, que me están apoyando, y que  me siento vivo gracias a ellos.

Estoy seguro que también de Cataluña, que es España, de toda la afición española. Vamos con la corrida de Arles. Al final pudo ser la alternativa que se fue posponiendo por culpa de esta maldita pandemia. Pero nunca es tarde si la dicha es buena ¿no?

Exacto. Por fin, por fin, por fin, después de cuatro fechas al final, por la pandemia, pudimos tomar la alternativa en Arles después de cuatro veces que se aplazó. La tenía que haber tomado con una corrida de Miura, la tenía que haber tomado en abril de este año, después junio y al final ha sido julio. Pero, bueno, ya, por fin, ya somos matador de toros y han ido bien las cosas.

Matador de toros con una corrida de la Quinta. Es decir, que tampoco ha sido echar un rato, sino medir que estabas preparado, que lo tenías muy claro y una corrida a la que le cortaste dos orejas (una en cada toro) que pudieron ser tres, me cuentan,  si no llega a ser por la espada en el último.

Si, así es, también este parón de la pandemia… todo este aplazamiento he sacado lo positivo y he podido sacar más tiempo para poder entrenar, para poder pensar en mi concepto y desarrollarlo. Un año y medio que me ha servido   para intentar mejorar cada día. Y, entonces, viene esta alternativa un año y medio después de lo previsto, pero gracias a este año y medio hemos evolucionado y creo que  he podido mostrar solo una pequeña parte de mi toreo, porque solo fueron dos toros. Fueron dos orejas, no soy nadie para hablar de tres, pero sí es verdad que esa faena del toro de la Quinta -que tuvo buenas condiciones y disfrute mucho- le pude sacar lo bueno de él y si no hubiese sido por la espada pues podía haber sido un trofeo más, eso fue culpa mía.

Eso está bien, teniendo autocritica, porque como decía el maestro Palomo Linares, el que no mata no come. Pero, bueno, cartel de lujo. Eso es  para el recuerdo, con Morante y Pablo Aguado y además salida a hombros. Más no se puede pedir.

Exacto, ha sido un año y medio muy complicado, muy complicado, muy difícil psicológicamente por haberse aplazado  las cuatro fechas; bueno, la primera y luego las otras y no saber exactamente cuándo va a ser y que se cambian los carteles, que al final se anula, esa incertidumbre…pero poder tomarla en Arles y con esa categoría de la plaza y con un cartel que hoy en día Morante de la Puebla y Pablo Aguado son dos figuras del toreo actualmente, pues es su sueño y la verdad que me hicieron sentirme muy bien y me recibieron muy bien en este nivel ya de matador de toros y por esto les doy las gracias desde aquí. Un sueño, un sueño, poder compartir un cartel como éste en una plaza tan espectacular como es la de Arles.

Ahora vamos a hablar de Maxime Solera como hombre, como persona. Estabas en el coso de Arles en vez de estar en Roland Garros. Cuenta, porque yo  sé qué eres de vocación tardía, porque entre otras cosas eres hijo del cuerpo, porque tu padre es torero, incluso te acompañó a ti de novillero en muchísimos espectáculos como subalterno, etcétera, y te da por ser torero a los veinte años cuando  podías ser hoy en día un campeón de la raqueta, del tenis.

Nunca se sabe. A ver, pues desde pequeño jugaba al tenis. Jugaba mucho, y estaba siempre en los mejores de mi región, de Francia, etcétera, etcétera. Pero, bueno, también tengo un hermano recortador y me transmitió esta afición por los toros de la camarga, pero no sé. Necesité llegar a los 17 años para empezar a torear, aunque, desde pequeño, desde muy pequeño, veía muchas corridas; mi habitación estaba llena de carteles. Pero, bueno, la cabeza metida en el tenis y como soy una persona seria, una persona metida al cien por cien cuando hago algo, pues, mi día a día era tenis, tenis, tenis y no pensaba en otra cosa. Pero cuando empecé a torear, dejé el tenis y seguí con el toreo porque era un mundo que me resultaba muy interesante. Con 17 años dejé la raqueta por el toreo, por el capote y la muleta. Dejé mi carrera de profe de tenis, también, que tenía y dejé todo  y me fui a Barcelona para ser torero.

 Fíjate  os habéis hecho prácticamente en España todos los toreros,  y, luego, de matador de toros, Francia es la que os da el impulso, como los cantes de ida y vuelta, y  volver otra vez a España, a las grandes ferias. Pero se pone esto, en Francia, interesantísimo, con Juan Leal, Adrián Salenc, El Rafi, Tomás Duffau… y ahora llegas tú  en un momento sensacional. ¿Esa rivalidad va a ser muy buena para la ya importantísima afición francesa?

Pues eso  pienso, que hay que pensar en el aficionado  más que todo, y, creo, que para el aficionado puede ser una competencia entre franceses muy buena y también la afición francesa  se siente muy orgullosa a la hora de tener toreros franceses. Aunque, para mí, el toreo no tiene fronteras, pero   hay veces que cuando somos franceses o españoles, pues nos gusta más ver un francés o  un español, ¿no?  Creo  que esto demuestra una salud positiva para la tauromaquia francesa y me alegro mucho por el aficionado.

Bueno, ¡toreador! que me alegro muchísimo por ti, por la escuela de Barcelona, por los amigos que te apoyan desde aquí,  como son Manuel Salmerón, José María Alarcón y  toda la gente de la Cataluña taurina, de la resistencia, y desearte muchísimos éxitos y reiterar mi enhorabuena porque no es fácil en un día de compromiso, después de tantos avatares que por fin tomas la alternativa, cortar dos orejas que pudieron ser tres, salir en hombros y  con una corrida de la Quinta.  Pues encantado de que nos hayas atendido en La Divisa.

Gracias a vosotros y un saludo a todos los aficionados españoles, franceses, catalanes y os doy cita para la feria de Ceret.