¿Importa el toro en las corridas de rejones?

¿Importa el toro en las corridas de rejones?

La primera corrida de rejones registró buena entrada y los rejones de muerte impidieron que se abriera la Puerta Grande. Una oreja cortaron Diego Ventura y Leonardo Hernández mientras que el confirmante Andrés Romero fue ovacionado en el sexto.

¡Pin! De escarapela a caballo ganador

A los tres rejoneadores de la tarde por congregar a tres cuartos de plaza en un día más futbolístico que taurino como se vio, incluso, en Las Ventas, cuando el Atlético de Madrid se proclamaba ganador de la Liga que se se vieron hasta bufandas en la plaza.

Conexión fluida con los tendidos, alardes y gestos para la galería toda la tarde para cumplir con el respetable pagador que eso es lo que demanada. Cuando al público se le ofrece por lo que paga la historia tiene sentido y cuanto menos respeto en algo que no es fácil como ejemplos a granel tenemos en esta plaza. Dentro y fuera de San Isidro.

Gusta y disfrutan en cada tarde. Es un público receptivo, sin filias ni fobias, que agradece la entrega de los rejoneadores y aplauden sobremanera la doma y belleza que presentan los caballos perfectamente engalanados. Un espectáculo para familias al completo.

¡Pan! Para la entrega de Leonardo Hernández que tuvo la Puerta Grande en la mano.

Leonardo cortó una oreja al quinto donde colocó un gran par de banderillas a dos manos. Tras los problemas el año pasado, que el papeleo de las aduanas le impidió disfrutar de su cuadra top, llegaba a Madrid para reconducir su posición: una lesión le quitó de Fallas y no encontraron hueco para él en Sevilla. Las Ventas era su mejor cartucho. Le pidieron con fuerza la oreja en el tercero al que descordó con el rejón de muerte. Motivo suficiente para echar por tierra lo logrado -especialmente las tres banderillas cortas al violín-. Volvemos a lo de siempre... el derecho del público a equivocarse.

¡Pum! A los rejones de muerte. ¡Que tardecita!

Pinchazos, pinchazos, más pinchazos... rejón trasero, caído, contrario... toda la gama para desesperación del público. A Diego Ventura le hizo perder una oreja del primero de su lote. Diego siempre está bien pero su nivel exige algo más. Pese a todo tuvo momentos de toreo intenso con Nazarí. Al confirmante Andrés Romero se le atragantó también el rejón. Algo que se preveía ante la falta de reunión de los palitroques en los lomos de su lote de Bohórquez.

¡Fuego! A la peligrosa tendencia que está aflorando en las corridas de rejones como si no importase el toro.

Se aplauden piruetas sin toro, clavar a toro pasado. Mientras no se pare embistiendo no se exige nada más. Cuidado con esto. No les vaya a pasar como en las de a pie...