Maestra Nati: "El que me hayan dado la medalla es el sueño de cualquier persona que tenga un trabajo que le guste"

Maestr Nati:"El que me hayan dado la medalla es el sueño de cualquier persona que tenga un trabajo que le guste"

"Lo que sí es verdad es que aunque la profesión haya sido, digamos masculina, las manos femeninas son las que han elaborado los trajes tan bonitos y los capotes de paseo. Eso es como lo veo yo".

Es una satisfacción moral tan grande de ver a un muchacho llegar a triunfar y que vaya envuelto en una ropa que tú has elaborado, pues de verdad, créeme que es una satisfacción grandísima.

Hoy en día para una mujer en cualquier profesión siempre que esté preparada es más fácil sus comienzos. Pero en la época mía hace tantos años, pues hombre, siempre el mundo machista era el mundo machista y más el mundo del toro.

 Pero a mí la voy a decir de verdad, de corazón, que me han respetado los toreros, los que he hecho la ropa y a los que no se la he hecho nunca me han faltado. Al contrario, me han dado un sitio, me he sentido satisfecha y cuando yo he visto un traje de torear bien hecho por mis manos y verle confirmar la alternativa que para ellos es lo máximo, y haber colaborado en ese vestido de torear que han lucido ese día tan especial. Pues yo la voy a ser sincera, me siento súper feliz.

Y hoy en día el que lleva la sastrería es mi hijo, que ya se ha establecido aquí. Vivimos en Mairena del Aljarafe, pero le voy a decir una cosa todavía he traído yo todos los diseños antiguos de mi madre, que se los hacía a Joselito y a Belmonte, a todos esos grandes.

Para darle otra forma hoy en día hacer un traje de torear hay que procurar que realce todas las virtudes que tiene el que se lo va a hacer físicamente  es muy bonito de hacer y luego los bordados se presta a que dentro que hay innovaciones, pero siempre  sean clásicos.

LA ENTREVISTA DE ROSI FERNÁNDEZ

Esta semana en  Mujeres taurinas, entrevistamos a  una mujer trabajadora con vitalidad, amante del toro bravo. Una institución en bordados y sastrería taurina. Isabel Natividad García de Frutos. Maestra Nati.

Casi un siglo dedicándose a vestir a grandes toreros en España, Sudáfrica, Francia, México...

Cuéntenos un poco sus anécdotas, su vida.

Bueno, mira, te voy a explicar, me inicié en esta profesión por mi madre. Mi madre, de jovencita era una grandiosa bordadora y trabajaba en la mejor sastrería que había, que era la de don José Uriarte. Pero falleció, y cuando acabó la guerra había que dar una corrida de toros en la cual actuaba Domingo Ortega y Antonio Bienvenida, Manolo Bienvenida. Resulta que  conocían a mi madre de cuando ella bordaba los trajes, se acordaron de ella, porque ya  no vivía el sastre. Y entonces mi madre localizó la maestra, la viuda, le prestó los patrones, buscó a sus compañeras y hizo la ropa para esa corrida. Entonces le gustó y dijo que ya iba a querer continuar con esa profesión. Y claro, como iba a entregar los trajes al Hotel Sevilla y el Hotel Sevilla estaba situado en Madrid, en la calle del Príncipe, donde está el Teatro Español, la Comedia, y mi madre iba a entregar los trajes porque allí paraban los toreros cuando iban a San Isidro. Entre ellos yo recuerdo los nombres de Pepe Luis Vázquez, Manolo Vázquez, Rafael Ortega, Pepín… , los de aquella época. Se enamoró mi padre de ella se casaron y ahí nací yo. Quiere decirse que yo he nacido en el mundo taurino y he estado siempre rodeada de toreros. Y luego, para remate de cuentas, me casé también con un torero. Entonces es mi profesión. Luego yo ya aprendí con mi madre y luego ya me inicié en ella siendo una mujer que ya mi madre me había facilitado las cosas. La verdad es que no ha habido otra mujer que se haya dedicado a la profesión de ropa de torear. Todos los demás son compañeros míos, pero yo he sido la única que he tenido la suerte de poder continuar con este trabajo que a mí me gusta muchísimo y luego me especialicé mucho en los capotes de paseo. Entonces yo he hecho los capotes de paseo, gracias a Dios, a casi todas las figuras que los llevan y llevan imágenes, porque los toreros normalmente tienen devoción cada uno por la imagen que más quieren y se las bordamos en los capotes de paseo y además los guardamos a mano. Quiere decirse que son unas obras preciosas de artesanía que no se deben de perder.

Qué bien!, cómo nos ha resumido esa vida de cómo comenzó desde los inicios con su madre, una sastrería de vestido de luces y como bien ha dicho especializada y que usted está encantada en sus capotes de paseo que son muy trabajosos  porque se hacen a mano. ¿Son  muchas horas de trabajo, en qué se inspira? ¿Qué es lo que le gusta que lleve el capote, cuéntenos?

Bueno, yo soy una enamorada de mi profesión. O sea, mira, yo acabo de cumplir en diciembre 88 años. Llevo trabajando en esto desde  que terminé el bachiller, he estado siempre en el taller con mi madre, al principio ayudándola y aprendiéndolo y luego ya como profesión para mí. Pero yo me he especializado porque me ha gustado mucho los capotes de paseo por la riqueza que llevan y que los bordados se pueden hacer de diferentes maneras, no hay una cosa fija,  puede ser muy creativo y todo depende del gusto del profesional que se lo va a poner. Hemos bordado imágenes… Pues hombre, si el torero es de Valencia, como es natural con la Virgen de los Desamparados y es de Andalucía, se borda mucho el Gran Poder, la Macarena, la Virgen del Rocío, ahora también la de Triana, el Cristo de las Tres Caídas, o sea todo este tipo. Pero también hemos hecho mucho, por lo menos yo la Virgen de Guadalupe para toreros mexicanos y también españoles que les gustan. Y luego también soy madrileña y le bordé Antoñete el capote con la Virgen de la Paloma. Y en fin, también depende del gusto del torero y te permite que hagas diseños diferentes porque a mí no me gusta que gracias a Dios los llevan los matadores y que salgan a la plaza y vayan igual. Quiere decirse que te permite ser muy creativo dentro de tu trabajo, ¿no? Y lo que sí es verdad es que aunque la profesión haya sido, digamos masculina, las manos femeninas son las que han elaborado los trajes tan bonitos, los capotes de paseo. Y eso es como lo veo yo.

Por ese trabajo bien hecho y de tantos años plasmando el arte fue reconocida en el 2019 con la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. La primera mujer en recibir este galardón. ¿Una gran alegría que nunca olvidará, supongo, porque eso es muy grande?

Pues mire, yo le voy a decir no sé si me lo mereceré. Lo que sí le voy a decir es que yo empecé hace tres o cuatro años por ahí puse una exposición que me concedieron en Madrid, en la sala de Antonio Bienvenida con 12 capotes que eran una belleza diferentes. Pero luego cuando he venido aquí porque mi hijo se ha quedado aquí en Andalucía y me ha traído porque decía mamá no te quedes sola en Madrid, vente conmigo y me he venido. Tengo la suerte de haber venido a Andalucía, Andalucía, aparte de que yo ya la quería por mi padre, que era de aquí. Pero el trato de las personas, cómo te tratan, parece que te conocen de toda la vida. Y luego el que me hayan dado la medalla es el sueño de cualquier persona que tenga un trabajo que le guste y que crea que se merece ese galardón. Y me lo han dado aquí en Andalucía y les estoy súper agradecida de verdad, porque me la han dado en vida. Quiere decirse que lo puedo disfrutar, ¿no? Y bueno, no sé si me lo mereceré, pero sí les agradezco infinitamente el trato que me están dado aquí en esta bendita tierra.

¿Cómo no se lo va a merecer?  Se lo merece  como mujer que ha plasmado el arte por diferentes paises, aficionada, taurina, trabajadora, constante.

 Y le voy a decir una cosa, hoy en día para una mujer en cualquier profesión siempre que esté preparada es más fácil sus comienzos. Pero en la época mía hace tantos años, pues hombre, siempre el mundo machista era el mundo machista y más el mundo del toro. Pero a mí la voy a decir de verdad, de corazón, que me han respetado los toreros, los que he hecho la ropa y a los que no se la he hecho nunca me han faltado. Al contrario, me han dado un sitio, me he sentido satisfecha y cuando yo he visto un traje de torear bien hecho por mis manos y verle confirmar la alternativa que para ellos es lo máximo, y haber colaborado en ese vestido de torear que han lucido ese día tan especial. Pues yo la voy a ser sincera, me siento súper feliz. No sé si me lo mereceré, pero ha calmado todas mis ilusiones, las he colmado y es el sueño que siempre he tenido. Llegar a ese punto ¿no? Y hoy en día el que lleva la sastrería es mi hijo, que ya se ha establecido aquí. Vivimos en Mairena del Aljarafe, pero le voy a decir una cosa todavía he traído yo todos los diseños antiguos de mi madre, que se los hacía a Joselito y a Belmonte, a todos esos grandes. Y es en lo que más feliz me siento, porque todavía, a pesar de mis años, pues me siento que puedo realizar el sueño de toda mi vida. Cuando Dios me lleve que sea haciendo lo que más me gusta, que es un traje de torero.

Oleee, ¿Cómo bien ha dicho su hijo ahora mismo sigue sus pasos y usted le ayuda, está ahí en la faena cada día?

Pues sí. Además le voy a decir una cosa hoy en día ha evolucionado la ropa de torear igual que todo en la vida. Hoy se viste de torero mejor que nunca, porque antes hacíamos las taleguilla más cortitas y las chaquetas más largas para tapar todas las cosas. Pero ahora la taleguilla es como una calzona de ropa corta que va altísima, con lo cual luce más la figura del torero, se estiliza más la chaqueta, es más cortita y eso sí ha ido evolucionando como todo en la vida. Para darle otra forma hoy en día hacer un traje de torear hay que procurar que realce todas las virtudes que tiene el que se lo va a hacer físicamente, es muy bonito de hacer y luego los bordados se presta a que dentro que hay innovaciones, pero siempre  sean clásicos, porque yo recuerdo un traje que le hizo mi madre a Luis Miguel Dominguín, que lo diseñó Picasso, pero claro, era una revolución en aquel tiempo, pero luego no, no, no, o sea, volvieron los toreros a lo de toda la vida, a los trajes clásicos y claro, tienen una belleza y un trabajo tremendo, pero en la plaza son una preciosidad.

¿Cuánto cuesta confeccionar un capote de paseo y un traje de luces?

 Bueno, mira, hija, yo tengo gente que me ayuda y yo no podría hacerlo todo sola porque no sería rentable. Mira, un capote de paseo, primero, mi hijo lo corta y lo diseña y luego entra una señorita que es la que pone el cordón, la guía del trabajo, el diseño y luego entra  las manos de la que pone la lentejuela, luego entra  las manos de la que borda las flores, o bien sean de colores, o bien sean bordadas y matizadas a mano. Luego, entre las manos de la que estamos haciendo la imagen para acoplarlo en el capote y luego lleva un material especial que compramos de toda la vida que no se pone feo y que luce muchísimo y que claro, pues tiene un precio, pero queda precioso porque es de una belleza tremenda. Lo que pasa es que cuando se lo pone en el paseo es tan poquito tiempo el que lo lucen que al mejor no se valora igual, pero si lo ves después es una cosa preciosa. Y claro, intervienen siete manos diferentes, imagínate para hacer un capote, porque una sola persona pues no sería rentable porque tardaríamos mucho.

¿Pero cuantas horas si nos ponemos a contar  las horas aproximadamente cuánto cuesta confeccionar un capote de paseo?

Hombre, pues mira, normalmente un capote de lujo, como ahora me han encargado varios y estamos haciendo ya para Sevilla y para Madrid… Pues  trabajando todos los días de verdad, entre varias personas, por menos  de veintitantos días no se puede elaborar.

Madre mía! Normal que gusten tanto. Es  todo trabajo artesanal y a mano. Su madre confeccionó muchos capotes a Joselito el Gallo, a Juan Belmonte. Usted también hizo ese traje precioso blanco de Curro Romero cuando pisó por primera vez Las Ventas ¿Tendrá anécdotas tremendas que han pasado por  allí, por el taller, figuras, figurones y toreros de historia,  sabemos que José Tomás lucio ese capote de Granada. Grandes toreros. Dígame  alguna anécdota o algún  momento que usted lo recuerde  muy importantes  en casi un siglo de trabajo?

Pues mira, me voy a explicar,  una vez estuve en Ronda y me abrieron el Museo Taurino y yo me quedé loca porque estaba el traje de cuando falleció la madre de Joselito el Gallo que  él se puso de luto y se hizo un traje negro bordado en negro. Y  ese traje está en el museo y  lo había bordado mi madre y a mí me emocionó, como también me he emocionado cuando he cogido un novillero que ha empezado como Palomo Linares y muchos más y le he visto confirmar su alternativa o tomar la alternativa con un traje que hemos elaborado, eso es una satisfacción tremenda. Yo por ejemplo, hay un torero que aparte ya de que  le admiro como torero, pero como persona que ha sido El Niño de la Capea, que yo lo cogí cuando debutó en Vistalegre, era un crío y luego el día que tomó su alternativa  yo le hice el traje y el capote de paseo, pues aparte de que es su medio de vida, es una satisfacción moral tan grande de ver a un muchacho llegar a triunfar y que vaya envuelto en una ropa que tú has elaborado, pues de verdad, créeme que es una satisfacción grandísima. Y como ese muchos, porque gracias a Dios, pues por las manos de mi taller pues ha pasado  Curro Romero, Paco Camino, El Cordobés y bueno… infinidad de toreros que no me gusta decir los nombres porque luego se me olvidan y se pueden sentir mal.

Pues Nati, ha sido un verdadero placer esta entrevista. La verdad es que es un trabajo tremendo y sobre todo mi admiración no solamente por ese trabajo, sino por ese amor tan grande al toro, la tauromaquia y todo lo que conlleva el arte y la cultura de nuestra fiesta, que tenemos el toro bravo en España. Muchas gracias.

Además, perdona, no se puede perder,¿ eh? Porque la admiran en todo el mundo y ahora no podemos permitir que aquí se pueda perder porque es nuestro. Encantada  joven. De verdad.