Morenito: “Se juntan muchas cosas, tras lo de Aranda, para que la tarde de Madrid sea importante“

Ha sido profeta en su tierra, como otras tantas veces, en una de las ferias de septiembre de mayor auge. En su ciudad, ha conseguido abrir la puerta grande las dos tardes. Esto es solo un aperitivo para lo que le espera en la próxima feria de Otoño. Morenito de Aranda, Jesús, buenas noches.

Buenas noches.

No es fácil ser profeta en tu tierra.

No. Cada tarde que toreo entre los míos siento que se me exige mucho más, pero mejor que sea así que no te traten de otra forma. Que cada día quieran ver más cosas de ti.

Fueron dos tardes muy emotivas, con dos salidas en hombros. La segunda te la habías ganado el día anterior. Eso, ¿le motiva a uno, le hace más fuerte, más rebelde?

Al final es un privilegio para mí torear las corridas que han sido. Han sido corridas muy fuertes, he dado siempre todo lo que llevaba dentro. La seriedad del toro no ha faltado, y encontrarte con el cariño de la gente es bonito. Parece como que todo es más natural, fluye mejor. Gracias a Dios, la primera tarde no fue fácil porque no se prestaron mucho los toros, pero pude dejar buenas cosas y sobre todo estar muy relajado. Cuando surgió la sustitución, no me lo pensé. Quería torear y sentir buenas sensaciones con una corrida de toros que me ilusionaba. Fue una corrida de Cortés que se prestó mucho y con la que me sentí muy feliz porque salieron las cosas.

Esto es un aperitivo importante, una carga de pilas, de cara al compromiso de la feria de Otoño en Madrid. Debe de ser un orgullo para un torero que cuenten con uno.

Sí, la verdad que Madrid siempre ha contado conmigo. Siempre me ha valorado en todos los ámbitos: desde el aficionado hasta las diferentes empresas. El estar anunciado en la feria de Otoño en un cartel que es ilusionante con toreros que han abierto la PG este año, hace poco, como Joselito Adame, que está haciendo importante. Es una corrida del gusto de la afición de Madrid. Se juntan muchas cosas para que sea una tarde importante y a mí me ilusiona mucho. Ojalá la corrida saque las cosas buenas, esté despejado y fluya lo que uno busca: naturalidad, expresión, que se mate bien… lo que pide uno siempre. Uno vibra todo el día con esas sensaciones, buscando que sea una tarde plena en muchas cosas y ojalá que se cumpla todo eso.

Hay que ver la letra grande: junto con Juan del Álamo, de los que más orejas habéis cortados en los últimos años, ¿cuántas han sido?

Diez, pero más que las orejas, las tardes. Han sido tardes como las del 2 de mayo, que fue de PG. Luego ha habido tardes en las que no han embestido los toros, pero creo que he dado una imagen muy torera. En Madrid es donde más se me conoce como torero y se me respeta. Creo que es por los motivos que he dado en el ruedo. Lo de Juan igual. Es un torero con una trayectoria en Madrid muy seria. Lo que queremos todos es salir de nuevo a hombros, pero cortar orejas en Madrid por la climatología, que embistan los toros… es muy difícil. Ojalá que queden muchas tardes importantes pero esta sea una de las que más.

En el recuerdo queda, aunque el protagonismo se lo llevase el maestro Juan Mora, aquel 2 de octubre… y que no se haya repetido ese cartel.

Es una pena. Es un cartel muy torero. Como aficionado, tanto al maestro Juan Mora como al maestro Curro, que son toreros grandiosos, les tengo mucha admiración. La verdad que me voy a ahorrar lo que pienso, pero son carteles muy bonitos, además con el aliciente de lo vivido ya anteriormente. No se ha vuelto a repetir no solamente en Madrid, sino en ningún otro sitio.

Es curioso, pero todos los santos tienen octava. El cartel es con Adame y Román, dos toreros también con la fiebre en la boca.