Tristán Barroso dejó el primer nombre novilleril de la temporada en Madrid. Sus dos actuaciones calaron en el público venteño. En su primero, le apretó las clavijas a diestras, recetando dos redondos macizos. Ahí el novillo, de buen estilo, acabó entregando la cuchara. Dejó perlas sueltas en los remates y naturales, sueltos. La espada desprendida prendió una oreja mayoritoria que el presidente no entregó. ¿ Si lo pide el público por qué negarla? Al igual que no concedió la oreja, debió devolver el 1º y 5º bis. En el sexto, con la tarde vencida, Trstán Barroso buscó la oreja, las cotas más altas llegaron a diestras, al principio. Ligadas, que el funo solo viera muleta. En cambio, el trasteo no cogió vuelo a izquierdas. Remontó el final por manoletinas sin espada. Los pases de pecho, largos, a la hombrera contraria tuvieron poso. La espada viajó desprendida y el presidente concedió la oreja.
Daniel Medina y Fabio Jiménez mostraran sus conceptos clásicos, ante unos lotes venidos a menos. Excepto el 2º, de mejor embroque que final- tiraba un tornillazo-, difícil de embarcarlo. FJ no renunció a su concepto- de corte urdialista en su manera de presentar los trastos- en un trasteo que dejó pasajes para seguir viendo al riojano, de tonos menores y otros mayores. Con el quinto no hubo manera ante la nula fuerza. El vallisoletano, Daniel Medina, dejó entrever sus finas maneras, de querer hacerlo despacio. Una novillada que deja un nombre propio y dos conceptos que merecen esperarlos.
Plaza de Toros de Las Ventas. Un cuarto de entrada. Novillos de Brazuelos, bien presentados, con cuajo, y venidos a menos. Destacó el 2º, para apostar, y el 6º, boyante, y María Cascón (5 bis), nulo de fuerza.
Daniel Medina, silencio y silencio tras aviso
Fabio Jiménez, silencio tras aviso y silencio
Tristán Barroso, vuelta al ruedo y oreja tras aviso
EL VÍDEO RESUMEN
GALERÍA FOTOGRÁFICA- ALFREDO ARÉVALO
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