​César Rincón: “El salir en hombros de mis compañeros de ayer y de hoy me emocionó tanto como la primera vez en 1991”

César Rincón: “El salir en hombros de mis compañeros de ayer y de hoy me emocionó tanto como la primera vez en 1991”

Yo venía preparado, pero eran 7 años que no pisaba Las Ventas desde la confirmación en el 84. La tarde previa, fuera de feria, del 28 de abril, fue una ideal toma de contacto

Torear al día siguiente después del triunfo fue una apuesta muy arriesgada, pero salió bien, y ahí, sí, empezó todo. Luego vino la Beneficencia y en septiembre en la feria de Otoño

Lo más importante tras la Beneficencia, la 3º, fue romper ferias completan que ya estaban hechas

La 6º Puerta Grande, para mí, tiene un valor incalculable porque tras la larga enfermedad nadie daba un centavito por mi reaparición y mis triunfos

CESAR RINCON, 30 AÑOS DE UN ACONTECIMIENTO HISTORICO

CESAR RINCON, 30 AÑOS DESPUES, VUELVE A SALIR POR LA PUERTA GRANDE

El pasado viernes 21 de Mayo se cumplieron 30 años de la primera puerta grande del maestro César Rincón en Las Ventas y el día 22 , otros tantos  de la segunda. La segunda tarde fue una apuesta   fortísima del maestro después del primer triunfo aceptando torear al día siguiente una arriesgada sustitución. Todo tiene un prólogo y por eso el maestro fue recibido con tanta expectación en San Isidro. La afición de Madrid tenía ganas de ver de nuevo al colombiano porque el 28 de abril, con una corrida de Cuadri , en la confirmación de alternativa de Raúl Zorita, un incipiente  Enrique Ponce  y César Rincón,  habían triunfado.

El sábado 22 en Las Ventas se le rindió un homenaje en conmemoración del trigésimo aniversario. Un cariñoso y emotivo reencuentro con algunos de sus compañeros. Juan José Padilla lo volvió a sacar a hombros por la puerta grande de Las Ventas. Tras el sentido acto pudimos ver al maestro emocionado rodeado de su familia y nos concedió la siguiente entrevista.

Merecidísimo homenaje maestro. Parece que fue ayer.

Parece que fue ayer y ya han pasado 30 años. Es increíble. Ha sido muy emocionante. Creo que hay cosas en la vida que no se pueden explicar. La verdad es que yo tengo que darle gracias a la vida, fundamentalmente, todo lo que es mi vida, mi alrededor, toda la gente  el querer estar presente, gente linda. Fue un día magnifico.

¿Recordarás perfectamente ese 28 de abril, donde comienza todo y empieza ese run-run con Cesar Rincon?

Si, realmente es algo bonito,  sobre todo porque  era mi primera actuación después de muchísimos años desde el año 84 que no toreaba en Madrid y que siempre estaba como espectador…. Y sabemos que Madrid es una plaza muy dura y casi inalcanzable para muchos.

Pero estamos ante un hito que no se ha repetido, no se ha producido nunca en la historia ni se ha vuelto a repetir. Cuatro. Cuatro puertas grandes en la misma temporada. La primera corrida de Baltasar Ibán. Segunda corrida de Murteira  Grave. Tercera con la corrida de Samuel Flores y la cuarta puerta grande con un toro de Moura y otro de Sepúlveda. Un valor añadido que da más mérito a esas cuatro puertas grandes. Hierros que ni en aquellos momentos ni en estos son comerciales.

Si, y sigue siendo así, sin ser muy comerciales. Pero bueno…. No me atrevería a decir esa palabra, porque en esas ganaderías de tipo comercial o que, matan más las figuras tienen que tener desde luego una base importantísima de casta, de bravura, de nobleza y que a veces embisten mucho más número de animales pero. …. seguramente no tienen las dificultades de otros hierros, por puntualizar el tema.

Llega la primera puerta grande. Eso es un espaldarazo importante, apuesta fortísima cogiendo la sustitución de Fernando Lozano el día siguiente repito Hierro de Murteira Grave. Pero llega la corrida de Beneficencia en un mano a mano con José Ortega Cano y nada más y nada menos que una corrida de Samuel Flores. A partir de esa tercera puerta grande César Rincón se convierte en un torero que rompe ferias; es decir, ferias que estaban ya anunciadas hay que recomponerlas de nuevo porque tiene que entrar César Rincón.

Sí, yo creo que eso fue la parte más bonita de todo ¿no? Porque, realmente no era fácil, ya estaban muchísimas ferias hechas. Realmente no había casi espacio para un triunfador en San Isidro y se abrieron muchos carteles y mi inclusión prácticamente era casi obligada. Empecé a contar en ese calendario taurino.

 Un recuerdo imborrable, la primera puerta grande, la segunda, la tercera, la cuarta en una feria de otoño. Luego, más tarde llega la quinta. Pero yo me quiero detener en la sexta y última puerta grande,  y de mayor mérito todavía,  después de una larguísima y grave enfermedad. ¿Esa puerta grande es la que te produjo ya una consolidación total y absoluta en tu intimidad?

 Lógicamente estamos hablando de esas cuatro salidas por la puerta grande del mismo año. Después, como saben ustedes me retiré por causa de esa enfermedad, pero volver a ser acogido  nuevamente en Madrid, a palparlo, a  salir por la puerta grande…. Era un triunfo a la vida. Yo creo que ha sido bonito. Ha sido una larga historia que ha tenido muchos altibajos por causa de las gravísimos cogidas que he tenido, pero al final, feliz, como en las películas, esas obras de arte que han hecho en el cine… y sobre todo,  esa frase única de una película que  dice que la vida es bella.

La vida es bella y mucho más cuando se recuerda treinta años después y se recibe el cariño de los profesionales y la afición. Porque el sábado en Las Ventas, César Rincón volvió a salir en hombros de los toreros.

 Fue impresionante. La verdad es que yo no me lo esperaba. Hay cosas que uno no las planifica y, sobre todo, más, en la tauromaquia. Sabemos que en la obra de teatro, pues, hay un guion y se van haciendo muchas cosas  que están escritas. Pero en la tauromaquia nada está escrito… esa espontaneidad. Y quiero  decir que ha sido tan bonito,.. Pensar que no era solamente Juan José Padilla sino que estaban los otros torero. Se me ponen los vellos de punta en este momento de pensar ¡qué maravilla! ¡qué bonito es el toreo! Y, repito…. Gracias. Y qué bonita es la vida.

 Muchas gracias por lo que nos has regalado, maestro.

Lo contrario, gracias a todos ustedes, porque siempre  han estado,  en el momento, en el instante y han sabido contarlo. Para mí es una grandísima satisfacción, de verdad mi más sincero agradecimiento a todos.