Maximino Pérez:" Un año difícil porque no ha ido la gente que tenía que ir a la plaza"

maximino Pérez:" Un año difícil porque no ha ido la gente que tenía que ir a la plaza"

Economicamente se ha perdido dinero pero artísticamente ha sido un éxito que es lo que se trataba. Se ha sembrado, había mucha gente y gente joven. Tenemos que trabajar todos porque la tauromaquia está en peligro.

Cada uno hace la guerra por su cuenta,  desamparados por el propio sector y compañeros, eso es tristísimo.

La plaza de Cuenca ha ido a mas en cuanto a público, espectáculos y lo de Illescas es un cartel que hemos vivido seguramente irrepetible, un cartel que nunca se había dado.

La  gente se ha desenganchado un poquito y hay que volver a engancharlos de nuevo y por desgracia para el carel que era y el precio de la localidad tan solo 20 euros pues desgraciadamente no hubo la gente esperada.

Cuando haces un cartel de aficionados corres este riesgo, pero lo bueno es que como era un precio muy asequible se vio mucha gente joven y esos son el futuro.

Vamos a tener que trabajar muy muy duro todos los empresarios y echarle mucho ingenio para recuperar todas las personas que hemos perdido por el camino y que además les va a costar ir a eventos multitudinarios.

Si no lo trabajamos bien, esto va a hacer mucho daño a ganaderos, toreros, subalternos…ojala tuviésemos ayudas o estuviésemos amparados, estamos desamparados no solo por los políticos si no también por el propio sector y los propios compañeros, y eso es muy triste.

Habra que abaratar precios, las localidades tendrán que ser muy asequibles y yo desde que empecé a trabajar con las figuras, yo lo que preparo no es una corrida de toros, tengo que preparar un acto social, el antes, el durante y el después.

LA ENTREVISTA

POR ROSI F. VAREA

Cuando hablamos de la Champions sabemos a quién nos referimos el empresario de MaxiToro , Maximino Pérez. Pudimos hablar de la feria de Cuenca y la tarde de Illescas.

Momentos duros, como ya hemos hablado en otras ocasiones, que sufre la tauromaquia. Se ha terminado la Feria de Cuenca y la tarde de Illescas. ¿Qué nos puedes contar al respecto? ¿Cómo ha ido el tema de las entradas y el resultado en tus plazas?

Bueno, es de los años difíciles porque no ha ido la gente que tenía que ir. La situación de la pandemia está condicionando muchísimo a la hora de vender entradas. Pero sí ha sido muy satisfactoria tanto una como la otra, artísticamente, que era de lo que se trataba. De no dejar dormida ni la Champions y ni Illescas.

La feria de Cuenca, desde el primer día, ha ido a más en cuanto a público y espectáculo. Y lo de Illescas ha sido uno de los acontecimientos que vives una vez en tu vida ¿no? A lo mejor es un cartel irrepetible o un cartel que nunca se había dado y que, tanto un torero como el otro, sobre todo Emilio de Justo estuvo extraordinario, los dos estuvieron como auténticos jabatos y con una grandísima corrida de Rehuelga. Y Perera, desgraciadamente, por la espada no pudo cortar trofeos, pero muy satisfecho en lo artístico, en lo económico, en un año que ya contaba que iba a ser muy complicado, pero que hemos dejado sembrado mucho.

Había un gran ambientazo en Illescas y, como ya he dicho, en Cuenca ha ido in crescendo; el primer día más flojito, en la de rejones un poco más y en el último día, con el colofón de Roca Rey, Morante y Emilio de Justo, ya hubo casi 5000 personas.

Sí que nos ha extrañado que, dentro del aforo permitido -bastante reducido- no se colgara el no hay billetes y tan solo hubiese media plaza.

Repito que es un año muy complicado, muy difícil. La gente se ha desconectado un poquito, ahora hay que volver a engancharla. Los precios eran muy económicos y por desgracia tan solo hubo 2000 (no llego a 2200) personas para el cartel que era y el precio que tenían las localidades, tan solo 20 euros. Yo esperaba que hubiera por lo menos 3.500. Desgraciadamente no fue así, pero los dos mil cien que pudieron vivir el acontecimiento os aseguro que van a repetir, por lo cual creo que algo habremos hecho bien. Hemos sembrado de cara al año que viene.  Estoy viendo el resto de los compañeros -y de distintas plazas- que están pasando por la misma situación, por lo cual no me siento satisfecho, pero sí me siento feliz por el resultado artístico que han tenido todos los eventos y, sobre todo, el de Illescas.

Yo me pregunto, Maxi, un cartel de lujo y un precio casi regalado, aparte de la pandemia ¿la gente de los alrededores no acudió a los toros? Es bastante preocupante, ¿no?

Bueno si, preocupante porque el cartel era muy atractivo. También hay que tener en cuenta que era un cartel muy de aficionado. Desde hace décadas. Lo decimos los profesionales, cuando haces un cartel de aficionados corres este riesgo. Yo creo que el problema no era tanto eso, porque tenía muchos alicientes y muchos atractivos.

Sí me alegro de una cosa, y es que, de las más de dos mil cien personas, había muchísima gente joven por ser asequible. Salieron y se  congregaron  mucha gente joven y eso es futuro , había un porcentaje muy alto de gente joven y eso creo que te da unas bases, creo que   en unos meses  --cuanto termine la temporada- sacaremos un análisis de lo que ha sido realmente esto y, cuándo lleguemos a la normalidad, que no va a ser dentro de seis meses, ni un año, ni dentro de dos…vamos a tener que trabajar muy, muy duro  todos los empresarios y echarle mucho ingenio para recuperar todas esas personas que hemos perdido por el camino y que, además, ahora le va a costar trabajo ir a eventos  multitudinarios.

Al final, el equilibrio económico que tú tienes que hacer de los festejos taurinos debe tener, yo creo, su compensación. Pero si no lo trabajamos bien, en algunas plazas se van a devaluar mucho los festejos, por lo cual le va a hacer mucho daño a los ganaderos, a los toreros, subalternos y ahora hay que sacar un análisis cuando termina todo esto.

 Ojalá tuviéramos una patronal que nos dijera:  mira, vamos a sacar estas medidas, vamos a tener estas ayudas. .pero, desgraciadamente,  estamos desamparados. Y no solamente por el Gobierno, ni por los políticos, estamos desamparados hasta por el propio sector y los mismos compañeros que es lo triste. No ves salida. Aquí, cada uno hace la guerra por su cuenta y, tristemente, ya no hablo de Illescas ni de Cuenca sino de la situación que va a pasar la tauromaquia, que al igual que otros muchos espectáculos- Cuanto antes la recuperemos pues mucho mejor.

¿Y qué podríamos hacer Maxi porque esto tiembla muchas veces?

Bueno, pues ahora a través de lo que sea abaratar precios, las localidades tienen que ser muy asequibles y yo lo llevo (creó que así lo he hecho toda mi vida, desde que empecé a trabajar con las figuras ya me mentalicé) intentando hacer. Yo lo que preparo no es una corrida de toros, es un acto social; el antes, el durante y después. 

Hay mucha gente, que va a los toros y va a pasárselo bien, independientemente de las faenas que se vean que, ojalá, fueran todos los días buenas. Pero estamos muy condicionados por el juego de los toros y porque el torero ese día tenga su día. Tenemos que trabajar todos a ver un poco hasta dónde podemos llegar.

Yo creo que con mis plazas voy a estar bien. Creo que las voy a mantener bien, pero me preocupa el futuro de la tauromaquia que ahora mismo -creo que- es un peligro si no tomamos medidas, cada uno en su casa sabrá lo que tiene que hacer. Yo creo que Illescas y Cuenca van a funcionar muy bien, pero el resto yo tengo dudas.

Pero, como hemos hablado, el precio de la entrada de Illescas era bajísimo y tampoco hubo la afluencia de gente esperada.

Si, un precio muy asequible. Además, era la dinámica que teníamos que seguir y, luchar por meter mucho público ¿no? desgraciadamente no fue así, pero, repito, hay dos cosas que me llegaron mucho: lo primero, el resultado y, luego, la gente joven que había. Todavía tengo que sacar esos valores, tengo que ver que errores hemos cometido y, en base a esos errores y de la manera que tengo de trabajar desde hace muchísimos años, me equivocaré todos los años, pero el análisis lo tengo que hacer para intentar que el año que viene el número de público sea bastante más alto del de este año.

¿En Cuenca respondieron los abonados? ¿Porque tenías miedo de que tuvieras más abonados que el aforo permitido?

Sí, desgraciadamente el 80 % de la sombra en la plaza de toros de Cuenca estaba abonada. Entonces, cómo yo empecé a vender en el mes de julio me cogió la normativa de tres bolillos (uno si y uno no pues no podía sacar el abono) por lo cual di la prioridad al abonado sin perder la titularidad de que sacara las entradas que estimara conveniente para los días que quisiera. Y ha habido de todo. Ha habido gente que ha sacado para los tres días, otros que solamente han sacado para uno. Otros incluso que no han ido, pero mucha gente -y eso me llena -ha llamado, porque el perfil de cliente que tenemos en el sector taurino es por encima de cuarenta y cinco años y ahora mismo es el más prudente, el que más va echando el freno de mano, lógicamente con el tema de la pandemia y los contagios, pero llamaban diciendo: oye, este año no voy a ir, pero no perderé mi abono ¿no?

Todos ilusionados en que el año que viene tengamos más normalidad. Quizá no hayan respondido como a mí me hubiera gustado los abonados, pero hemos ido creciendo en la feria.

Muchas gracias, siempre, por atendernos muy amablemente siempre que se te llama.

Muchas gracias, muy amables.