El triunfo de un siglo y medio "piedranegrino" en la Monumental Plaza México

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ENERO 5





MARYSOL 2111746

TEMPORADA GRANDE + PLAZA MÉXICO


El triunfo de un siglo y medio piedranegrino



POR MARYSOL FRAGOSO

FOTOS: CORTESÍA PLAZA MÉXICO


La undécima corrida de la Temporada Grande en la Plaza México fue una cita con la historia toda vez que conmemoró que durante 2020 la ganadería Piedras Negras se encuentra cumpliendo el CL aniversario de su fundación. Lo cual generó la lidia de un encierro del añejo hierro tlaxcalteca, que resultó bravo y encastado. El sello de la corrida fue la emoción y el interés que su lidia generó entre los aficionados.

El último toro del festejo llamado “Siglo y Medio”, fue indultado.  Ese ejemplar contó con hechuras sin mácula, de hecho, fue perfecto en tipo y brindó estupendo juego, mismo que no logró apreciarse en su totalidad, debido a que su lidiador, Gerardo Rivera, se quedó muy por debajo de sus grandes condiciones, en una faena que realizó a toda velocidad, ahogando al burel y carente de temple. Por ello, a pesar de que el toro no se volcó en la pelea con el picador, el público que apreció, su bravura, su buen estilo, recorrido y codicia, se puso de parte del astado y acabó por solicitar el indulto. Tras el amago de Rivera por realizar la suerte suprema, optó por irse por el camino fácil y no tirarse a matar para conformarse con un triunfo relativo y cuestionado, tras concederse al ejemplar el perdón de la vida. Además, lucieron por su juego los bureles lidiados en primero (bravo) y cuarto (noble), que correspondieron a José Luis Angelino, quien con oficio y correcto en sus procederes, cumplió, aunque al lidiarlos poco dejó escrito en el ruedo; mientras que Antonio García “El Chihuahua”, se esforzó ante el lote de menores posibilidades.


Habrá que señalar que, debido a la efeméride, los toros fueron bautizados con nombres alusivos a los principales patriarcas de esa ganadería madre en México. Las pizarras lucieron con los títulos: Don José María, Don Lubín, Don Wiliulfo, Don Romárico, Don Raúl, así como “Siglo y Medio”, de acuerdo a lo indicado por el criador actual, Marco Antonio González Villa y su hijo Patricio González, quienes representan la sexta y séptima generación de línea directa en la cual recae el manejo de la emblemática dehesa.


Gerardo Rivera cumplió su segunda actuación en este coso desde 2016, cuando confirmó el doctorado, ha toreado pocas corridas en ese tiempo y apenas ha tenido evolución. Hizo albergar esperanzas al recibir al tercer toro con un quite reposado y de buen gusto, pero tras una regular colocación de banderillas se volvió a revolucionar por lo que no midió lo alcances del fondo del astado que terminó por echarse en la arena, donde debió ser apuntillado.

Al sexto lo recibió con una larga cambiada de rodillas, a porta gayola con más voluntad que buena ejecución. El astado cumplió en varas y lo banderilleó en conjunto con Angelino. En cuanto tomó la muleta, se hizo más evidente la grandeza del toro que metió la cara con largueza, por bajo, con calidad y transmisión, y la gente empezó a sacar los pañuelos blancos.  El mejor pitón fue el derecho y el diestro tlaxcalteca le sacó partido. Como empezó a sentirse superado, abandonó el cite de largo para que el toro no luciera, pero ya era demasiado tarde, pues todos en el coso se habían percatado de la codicia y la emotividad del animal. Gerardo siguió toreando a toda velocidad. Se pidió el indulto y el torero se decantó por aceptarlo. Fue así como “Siglo y Medio” se llevó la gloria merecida para el linaje de esta ganadería que al paso del tiempo se mantiene fiel a sus principios de crianza.


Más centrado que en otras ocasiones José Luis Angelino lidió el mejor lote en su conjunto, lució con el capote, estuvo esforzado con banderillas, pero a pesar que estar variado y empeñoso, no alcanzó a redondear a ambos bureles con la muleta y con ello perdió la oportunidad de haber cuajado un triunfo resonante. Antonio García “El Chihuahua” no tuvo toros con opciones, el segundo desarrolló peligro y el quinto, sin transmisión y medido de casta. Cabe destacar que el ganadero Marco A. González Villa fue ovacionado rotundamente por el público durante la vuelta al ruedo y su salida del coso.


FICHA

PLAZA MÉXICO.

DOMINGO 5 DE ENERO. UNDÉCIMA CORRIDA. Aproximadamente cinco mil aficionados en tarde fresca pero apacible.

SEIS TOROS DE PIEDRAS NEGRAS, bien presentados, encastados, sobresaliendo por su juego primero, cuarto y sexto (éste último fue insultado5). PESOS: 534, 490, 522, 530, 520 y 511 kilos.

JOSÉ LUIS ANGELINO (azul rey y oro):

Silencio y silncio tras aviso.

ANTONIO GARCÍA “EL CHIHUAHUA” (verde y oro):

Palmas y silencio tras aviso.

GERARDO RIVERA (turquesa y oro):

Palmas e indulto

INCIDENCIAS: El toro indultado se llamó Siglo y Medio, número 23, con 511 kilos de la ganadería Piedras Negras. Tras el paseíllo al ganadero se le entregó dos reconocimientos dedicados al 150 aniversario de la fundación de la dehesa.


1 Comentarios

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Excelente comentario Marysol como siempre muy completo y atinado Felicidades gran crónica

escrito por Alfonso de Robina 06/ene/20    22:39

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