Novilladón de La Quinta y triunfo de Valadez para abrir San Mateo en Logroño

Una novillada santacolomeña con el hierro de La Quinta abría, en la tarde de este lunes, la Feria de San Mateo de Logroño. En el cartel, tres novilleros como Leo Valadez, Alfonso Cadaval y Toñete haciendo el paseíllo.

En el primero de los encuentros, el novillo derribó de forma espectacular al caballo, echando la cara arriba defendiéndose en el segundo encuentro con el jaco. Un novillo parado, sin terminar de transmitir, al que Valadez toreó al natural de forma ajustada por momentos. Fue la mano en la que basó el trasteo, pero por la diestra se los tragaba de uno en uno. Al tirarse a matar, el novillo le propinó un fortísimo volteretón. Espectacular cogida. Le partió la taleguilla izquierda y fue aparatosa la cogida. A la segunda, tras reponerse con la ayuda de los subalternos, enterró el acero y cayó el animal. Hubo petición de trofeo pero sin concesión final. Vuelta al ruedo.

El segundo salió con muchos pies, un animal bello de estampa. Cumplió sin destacar en el caballo, al igual que en banderillas. Vistoso fue el quite del novillero. El de La Quinta se aburrió con Cadaval, con un toreo muy vertical, respondiendo el animal hasta que se vino abajo. Le tocó las telas al sevillano y, a partir de ese momento, se vino abajo el trasteo. Animal fijo, al que se los pegó de uno en uno. Falta de entendimiento entre el novillero y el animal. Se tornó en pasador su tranco. Mató de bajonazo y dio vuelta al ruedo tras petición.

Toñete recibió gustándose al tercero, otro novillo bonito de estampa. En el caballo y en animal no dio juego el santacolomeño, quitando por crinolinas Valadez. Lo vio pronto Toñete, y se puso de verdad en proposición para plantearle trasteo al cárdeno. Quiso hacer las cosas bien: corriendo las manos, alargando el viaje y llevando embebido en los trastos al animal. Cortó una oreja tras pasaportarlo con la espada.

El novillo cuarto fue el que mayor juego dio y más transmisión dio, cortando dos orejas Leo Valadez, siendo premiado con la vuelta al ruedo el santacolomeño en el arrastre. Bien con el capote comenzó el azteca, siendo un trámite el tercio de varas. Quitó por verónicas Alfonso Cadaval, replicando por zapopinas Leo Valadez. A revientacalderas comenzó con un toreo bullidor de rodillas, y fue a más la condición de un astado que no se cansó de tomar los trastos del mexicano. Por ambos lados lo pasaportó con tremenda lucidez Valadez, superior a zurdas, tirándose a matar dejando una estocada entera hasta los gavilanes. De hinojos terminó, antes, un trasteo que caló en La Ribera. Dos orejas.

Una oreja paseó Cadaval del quinto, un novillo manso de libro, ya barbeando las tablas de salida. En varas, salía huyendo de los petos en cuanto notaba el hierro. En banderillas, la cuadrilla pasó las de Caín dejándoselas de una en una. Firme, el sevillano se puso en los medios ante un novillo que se arrancó pronto y se creció. Por ambos lados lo pasaportó con actitud y determinación, más que oficio. Mató de estocada en buen sitio y paseó el premio entre el cariño de la afición riojana.

En el sexto, como mejor anduvo el novillero Toñete fue al natural. El astado escuchó palmas de aprobación de salida. En el caballo, el novillo desmontó al picador y se enceló con el peto. Firme anduvo el novillero, pero le faltó el punto de transmisión a su oponente tras llegar arriba. Palmas tras aviso.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de La Ribera, Logroño. Primera de la Feria de San Mateo. Novillada picada. Un tercio de plaza.

Novillos de La Quinta, de vuelta el cuarto.

Leo Valadez, vuelta al ruedo y dos orejas.

Alfonso Cadaval, vuelta al ruedo y oreja.

Toñete, oreja y palmas tras aviso.