Morenito: “No era sólo matar seis toros, sino dar un paso al frente en el que creo he dado la cara”

Vamos a comenzar el programa con los dos protagonistas de los acontecimientos que tuvieron lugar este domingo. Fundi y Morenito de Aranda, que se encerró ayer en su Burgos natal con seis toros de Adolfo Martín, triunfar y casi llenar la plaza. Al menos satisfecho. Buenas noches.

Buenas noches.

Felicidades porque se cumplió casi todo el guión, porque la parte que no se cumplió no se preveía.

Sí, fue una tarde difícil porque la corrida no prestó facilidades quitando el último toro, que tuvo temple y fue agradecido. Los demás fueron revoltosos. Desde primera hora fue una tarde importante y muy emotivo todo el inicio y el desenlace más si cabe. Fue tirar hacia adelante, pensando siempre que aquello iba a tomar vuelo.

Un reconocimiento a una gran capacidad. Te habías encerrado en Aranda, pero no eran seis de Adolfo. Y eso tiene sus pros y sus contras. Y tal y como salió la corrida de Madrid. Un reto que marca la capacidad de un torero. Hablo del saber torear, de la exquisitez, de la excelencia, de las buenas maneras… y la capacidad de lidiador cuando salen toros no para el lucimiento sino para demostrar el torero largo y completo.

Creo que al final lo primero te lo da tu fondo interior. Uno torea como lo siente. Lo otro es un preocuparse de la profesión en la que estás, el tener un oficio importante que tiene una capacidad para entender el mayor número de toros posibles desde que me lo inculcaron. Creo que he tenido el amor propio de intentar desarrollar más cosas e intentar ser mejor. Toro tras toro no iban ofreciendo posibilidades, intentar comprender cosas, al toro que le tenías que coger un poco más de hueco, al que lo tenías que apretar apretarlo… muchos matices.

Tres años sin estar. Me sorprendió un poco todo. La plaza que yo conocía era otra distinta. Me quedo con esta por muchas razones. Lo primero por la comodidad para todos y porque en Burgos molestaba mucho el viento y ayer, si con esa corrida hubiese hecho viento, la cosa no sale como sale. Hubiese sido imposible. Fue agradable en ese sentido todo. Las peñas y todo el mundo, con su particular sentido de vivir la tarde de toros, pero con mayor respeto si cabe. No sé si porque la acústica los duerme pero bien. Burgos tiene una sombra muy buena.

¿Te sorprendió que la plaza casi se llenara? Y digo que Burgos no es pequeña.

Se generó mucho ambiente cuando se dio la noticia.

Tenía su morbito.

Era la vuelta a Burgos. Llevaba desde 2007 sin contratarme Carlos con su empresa y creo que se generó esas cosas que a la gente le motivan. No me sorprendió por eso pero fue una sorpresa agradable.

¿Cómo fue tu reencuentro con los Zúñiga?

Con Carlos padre me une un lazo que nunca, aun habiendo distancia, se ha roto. Es mi maestro. Con su hijo en muchas ocasiones hemos tenido bastantes diferencias, pero el tiempo pasa y hay que tener la mente abierta para no quedarse en eso y pensar en las grandes cosas que hemos venido. Ha sido un paso adelante.

¿Fue el padre a verte?

Sí, y le brindé un toro.

Se emocionaría supongo.

Sí, hemos hablado en varias ocasiones de todo esto y me ha tenido siempre y en estos momentos me tiene más. El lazo está ahí, estará siempre y el respeto y el cariño también. Me alegro mucho de verlo también. De sentirlo. Siento la tarde como si la estuviera viviendo yo y me alegra esa satisfacción.

Taurino antiguo, de los de antes, de los que ya quedan pocos. Supongo que no le pasaría desapercibido el detallito de poner algo en la montera cuando le brindaste.

Se le pasó, se le pasó.

¿Se ha hecho moderno?

No, pero tuvo un detallazo. Luego llevaba queriendo encontrar el momento para darme unas cosas, me llevó un montón de recuerdos al hotel. Sabes cómo es Carlos de corazón y sentimiento. Lo que vale es lo que se siente. Pero un detallito también viene bien.

Termino hablando de futuro. Cortaste una oreja en Madrid, en el principio de una feria larguísima. La segunda corrida no acompañó… ¿cómo está la temporada por delante? Este reto te viene cuando están muchos carteles ya hechos.

No es fácil. Todo el mundo conoce a Morenito de Aranda, sabe quién es. Siento que por ejemplo ahora mismo la única feria que tengo cerrada es Teruel. Voy a torear, porque hay otras corridas en pueblos de categoría que merecen todo el respeto, pero no es fácil año tras año dar la cara en Madrid, hacer cosas como la de ayer, mostrar todo eso que estamos hablando. Entiendo que hay muchos toreros nuevos, pero sí que creo que debiera de haber más sensibilidad en este caso.