Talavante hace el toreo sin espada y pasea el único premio de la tarde en Istres

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PACO MARCH

La presencia de Alejandro Talavante, Juan del Álamo- en sustitución del herido Andrés Roca Rey- y Ginés Marín acogía este sábado la plaza de toros de Istres para la segunda corrida de toros de su abono, un festejo en el que tomaba la alternativa el rejoneador Laury Tisseur. Se lidiaban toros de Capea para rejones y Zalduendo para lidia a pie.

No terminó de romper una corrida de Zalduendo en la que fueron ovacionados el rejoneador Laury Tisseur, Juan del Álamo y Ginés Marín; el único premio lo paseó Talavante. Abrió plaza el rejoneador francés Laury Tisser con un toro de El Capea. Más voluntad que lucimiento y ovación final.

Una oreja de mérito ha cortado Talavante en el primero de lidia a pie, un Zalduendo que de salida se pegó una vuelta al ruedo en el callejón tras destrozar las tablas y entrar en él. Apuntó buenas cosas en el capote de Alejandro y en el inicio de faena en redondo, metiendo bien la cara, también al natural. Pero pronto se paró lo que obligó al extremeño a un toreo de cercanías, aguantando miradas y parones. El estoconazo de rápido efecto hizo el resto para que la petición de oreja fuera mayoritaria.

Entró Juan del Álamo en sustitución de Roca Rey - bien por los gestores de El Palio- y su debut en Istres evidenció su espléndido momento. Largas cambiadas en el tercio y buen juego de brazos en las verónicas. Poco castigado en varas el toro, Del Álamo lo llamó desde los medios y se arrancó con alegría. Un punto de genio en las embestidas que el salmantino condujo con largura y la muleta siempre por delante para engancharlas. Se acostaba por el pitón derecho y hubo un par de series al natural de magnífica expresión. Pena fue que la espada no funcionó quedando todo en ovación.

Toro deslucido el de la presentació de Ginés Marín en Istres que frustró las expectativas de torero y aficionados. Lo intentó Ginés pero sin otros logros que algún muletazo suelto. El cariño del público le hizo recoger unos aplausos de reconocimiento.

Pinchó Talavante a su segundo después de torearlo a lo grande. Faena brindada a El Fundi y a tal señor tal honor. Toro noble y de excelente son que Talavante exprimió por los dos pitones en series ligadas y rotundas, aderezadas con adornos y remates muy toreros, arrucina incluida. Lo que iba para triunfo gordo la espada lo convirtió en unánime ovación.

Larga faena de Juan del Álamo en el segundo de su lote que flojeó al inicio y se echó antes de que tomara la espada. Lo mejor llegó de mitad del trasteo en adelante cuando cuajó tres grandes series al natural. Un pinchazo, estocada y ovación.

El torero inicio de faena de Ginés Marín prometía lo que casi de inmediato se encargó de frustrar un toro que se paró muy pronto. Porfió Ginés metido entre los pitones pero nada había que rascar. Desilusión en el torero y, claro, en el público.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Istres, Francia. Segunda de feria. Corrida de toros. Lleno.

Toros de Capea para rejones y Zalduendo para lidia a pie.

El rejoneador Laury Tisseur, ovación.

Alejandro Talavante, oreja y ovación.

Juan del Álamo, ovación y ovación.

Ginés Marín, palmas y palmas. 

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