A CADA CERDO LE LLEGA SU "SANMARTÍN"

EDITORIAL

PROGRAMA "LA DIVISA" ( 01 MAYO 2017)

A cada cerdo le llega su “sanmartín”

EL GRAN MUÑIDOR DEL "PLAN AGUIRRECHE" (TOROS POR CEMENTO)

14 DIAS DESPUÉS DE CONCEDER LA PLAZA HIZO, "POR EL FORRO DE SUS CAPRICHOS" EMPRESARIO DE MADRID AL LADRILLERO MAYOR DEL RÉGIMEN FIDEL SANROMÁN

EL "CARTEL" DE LA MONUMENTAL TORTURÓ POR AÑO Y MEDIO A ESTE PERIODISTA HASTA ACABAR CON "EL ALBERO" (20 AÑOS EN ANTENA Y 280.000 OYENTES)

LUEGO SU SICARIO SALVADOR VICTORIA (IMPUTADO) SIGUIÓ LA PERSECUCIÓN PARA ABORTAR ESTA "DIVISA" EN ONDA CERO Y LA PRESENCIA EN "HERRERA EN LA ONDA"

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EDITORIAL

PROGRAMA "LA DIVISA" ( 01 MAYO 2017)

A cada cerdo le llega su “sanmartín”

La noticia convulsionó España.

No por no esperada. Se veía venir, más temprano que tarde: Ignacio (Nacho) González -expresidente de la Comunidad de Madrid- ya está en el “talego” acusado de múltiples delitos que se resume en presunto “chorizo” y a

lgo más.

Presunto –por supuesto- mafioso como cabecilla de banda criminal organizada, todo según su Señoría.

Los pormenores y el histórico de relato los conocen todo el mundo.

Esta noticia que entra de lleno en la crónica política, de tribunales y de la corrupción más abyecta tiene su ramificación a lo taurino puesto que durante mucho tiempo fue el responsable (o irresponsable) de los “toros” en la Comunidad de Madrid (por lo tanto de Las Ventas) desde sus poltronas tras despojar a la Consejería de Cultura de tal competencia (el verbo aquí está oportunamente traído incluso lo “secuestró” en su calidad de Vicepresidente.

Premisa previa : todos los delitos de que es acusado, y de los que no, fueron bajo el auspicio de la Presidenta Aguirre.

En el asunto taurino se rodeó de sicarios y ejecutores (internos y externos) para llevar a cabo su muy particular política en la que sobresale la concesión (con ocultismo, premeditación, nocturnidad y alevosía) un fin de año (2004) a la oferta de Taurodelta.

No era la mejor, pero en principio no cayó mal en la opinión publicada (algo peor en la opinión pública).

El hecho de tal parcialidad no era vengarse de Simón Casas, que también (le había denunciado judicialmente por concursos anteriores oscuros) no.

¿Un intento de favorecer a José A. Martínez Uranga? Tampoco. Sí beneficiar –tenía 500.000 motivos y tamayazos espurios para hacerlo- al “ladrillero” oficial de la Comunidad de la señora Esperanza mediante la recomendación que días antes de finalizar el plazo de licitaciones se le hizo a JAMU de asociarse con “tío Fidel”.

Un personaje que muchos meses antes andaba presumiendo (incluso no habían renunciado “los Lozano” a la prórroga) de ser el próximo empresario de Madrid sin cortarse un pelo, como -nadie lo ha desmentido- hizo “sacando pecho” en un burladero de La Maestranza.

Corría abril (creo) de 2004 y por esas calendas “tío Fidel” tenía un compromiso de ir “por Madrid” de la mano de Paco Dorado vía Jesús Verdugo, que es quien hizo la transición ganadera de Ortega Cano a Sanromán.

Todos los personajes están vivos y no me dejarán por embustero.

Ahí, en esas horas previas a cerrarse el plazo para concursar empezó todo.

Pocos días después, creo fue un 14 de enero de 2015 y me parece recordar en una notaría de Las Rozas, se revertía el espíritu taurino del concurso mediante (con la traición de Ramón Calderón, que iba como socio minoritario de JAMU) una oscura transacción de acciones que convertía a Uranga en Presidente (irrelevante) de la nueva sociedad constituida.

La mercantil Taurovent sustituía a la concesionaria oficial Taurodelta.

De esta forma pasaba a tomar el mando de la gestión “Las Ventas” –plenipotenciariamente- Sanromán, que colocó en el más noble despacho de la Monumental madrileña a su abogado José María García Luján.

Todo este proceso, que según eminentes juristas de la época consultados (y publicado/emitido) por el programa que yo dirigí durante 20 años “El Albero” en la cadena Cope, constituía un fraude de ley en la que los hombres de Esperanza y “El Chino González” no es que miraran parra otro lado, no: eran padrino y madrina.

Se perpetraba así la “Operación Aguirreche” (subtitulada “Toros por cemento”). Fueron titulares de los varios editoriales de El Albero en un momento en que se debatía en el Congreso el secesionista “Plan Ibarretxe” y tomaba fuerza una campaña de acopio de alimentos.

Tan sólo dos medios, dos periodistas (el ABC de Zabala de la Serna y “El Albero” de la Cope –mejor decir, y perdonen la inmodestia, “El Albero” de Pedro J. Cáceres-) pusieron énfasis, entusiasmo y constancia en la denuncia continuada de tal atropello.

Ni uno ni otro fuimos denunciados en sede judicial nunca. Pero

no tardaron en sobrevenir las asquerosas amenazas indirectas a través de nuestros máximos responsables en dichos medios. Vicente fue blindado por su director, creo recordar era Zarzalejos.

A servidor comenzaron a llegar las presiones de COPE con base tan peregrina como que la Cadena se estaba jugando unas concesiones de frecuencia que dependían de la Comunidad.

El 23 de mayo de 2005 empezaba la cuenta atrás hasta la finalización del contrato en vigor al 31 de diciembre e 2006.

Una ¿reunión? en el hotel Miguel Ángel a una banda doble y una víctima: el que suscribe -frente al “paredón” -con la mano derecha de “El Chino” (Pedro A. Martín Marín) y el más gris director que haya pasado por Alfonso XI (sede de COPE) refugiado en su apellido, Nasarre, para trepar en el binomio comunicación-política.

Se ponía en marcha el temporizador que se consumaría en la fecha señalada con el “albericidio”; dejando sin trabajo, sin indemnización, ni paro a un padre de familia con dos hijas en edad docente haciendo del lema “la verdad os hará libres” una gran mentira.

La única verdad es que “El Albero” saldó, a finales de 2006, 280.000 oyentes de los que me siento muy orgulloso.

Meses antes, ya en el 2006 , con la mediación del diputado Javier Rodríguez, posterior Consejero de Sanidad estigmatizado por “el évola”, fui invitado a un almuerzo privado en la Casa de Correos por el presunto delincuente González donde pude comprobar su catadura moral: cero en escrúpulos y un 10 en “hijputez” que creí estaba en Chicago, Marsella o Sicilia y no en la Puerta del Sol de Madrid.

Luego, con el paso de los años y siendo ya Presidente de la CAM ofició de secuaz su vicepresidente, un tal Salvador Victoria (implicado e investigado por “la púnica”), para provocar la retirada inmediata del sucedáneo de El Albero, ésta Divisa, en Onda Cero, como mi colaboración con Carlos Herrera.

La justicia es lenta y sí, es eficaz contra el delincuente, más tarde o más temprana; no así con los damnificados.

Pero “Dios los cría y el viento los amontona” quedando el alivio de saber que la “lista de espera” ha empezado a correr.

No deja de ser un analgésico que a “cada cerdo le llegue su “sanmartín”.