Castella salda en oreja y oreja su encerrona

|


LUCAS MORALES / FOTOGALERÍA: MIGUEL MORALES


Hoy se dio por finalizada la temporada taurina en Medellín, con un encierro de varias ganaderías y la presencia en solitario del francés Sebastián Castella. Segundo año consecutivo que la temporada paisa presentaba una encerrona dentro de sus carteles, el año pasado correspondió a Juan de Castilla matar 6 novillos en la despedida de novillero de su ciudad y esta vez la apuesta fuera para el torero de Beziers.


Dentro del resultado artístico, si lo hablamos puramente de las estadísticas tenemos que dar parte de un penoso corte de apenas 2 orejas, pero no se deje engañar amigo aficionado, hubo cosas peores que esa, el corte de los trofeos es apenas la muestra de como una gran apuesta se puede volver en contra en cuanto el toro, que es al único que no le preguntan si quiere "colaborar”, decide echar todo al suelo.


De la presentación de los toros diremos que naturalmente fue variada dadas sus procedencias y manera de criarlos. De la presentación del torero habrá mucho que contar, sobretodo que se vio cómodo y seguro en la plaza, como toreando en su casa, tanto fue así que el mismo Castella fue quien ordenó, inexplicablemente, cerrar el techo corredizo que tiene la cubierta de la plaza de toros de Medellín. Con su primero, un toro muy bien presentado de la ganadería de Santa Bárbara se le vio en lo que todos le conocemos, una idea preconcebida del toreo que encaja perfectamente en los tres tercios del ritual, la faena nunca rompió con fuerza en los tendidos y todo quedó en unas tímidas palmas que bajaron desde el tendido. En su segundo, un bonito toro de Achury Viejo que metió riñones en el capote y embestía con clase a los vuelos de los trastos presentados en el ruedo nos quedamos con ganas de verlo porque se malogró y tuvo que ser devuelto a los corrales. En su reemplazo salió un toro de Ernesto Gutiérrez, 


ganadería que hizo turno en 3° y 4° lugar. Compactando estos dos toros, iguales de presentación y casi iguales en juego, habrá que contar que le transmitieron la sosedad y el peligro al que iba vestido de luces, porque las faenas fueron casi idénticas, muletazos sueltos y voluntad de tratar de ligar tandas sin que se llegase a concretar aquello.

Todos estábamos expectantes que la tarde cambiara de rumbo, íbamos por el camino de ver lo casi exactamente lo mismo en los tres primeros toros, sabemos que Castella es de esos toreros de los que uno sabe exactamente que esperar y hoy no fue la excepción. Al cuarto un encastado toro de Achury Viejo, para el que algunos pidieron el indulto lo toreó con capote y muleta con el selló de la casa, ceñidos quites, un cambiado por la espalda tandas en redondo ligando pases con remates por bajo y acertando con el acero lo que le valió para cortar el primer trofeo de la tarde. Ya con el quinto otro animal bien presentado de Santa Bárbara, el francés salió a sellar su salida por la puerta grande, logrando darle tandas de mucho valor que fueron suficientes para que los que llenaron casi ¾ de aforo pidieran la otra oreja que aseguraba la salida por la puerta de San Juan. Para entender lo que pasó con el sexto toro, un sobrero de 


Ernesto Gutiérrez, basta leer lo dicho en este mismo acerca del 3 y 4, animales con peligro escondido en la sosedad de sus embestidas, que no dejaron estar ni triunfar y que fueron tóxicos para el torero, toda vez que este se contagió de la abulia que trasmitían los toritos manizaleños. Que dicho sea de paso, podrían gozar de un merecido descanso para que la ganadería que todos conocimos triunfando en Medellín resurja con más fuerza en ferias venideras.

En conclusión no creo que haya sido una buena tarde de toros, tampoco mala. Sólo que sé que la gente esperaba más de lo que allí pasó y una apuesta tan grande, como ya lo dije, exige retos y decisiones más arriesgadas. Conformarse con más de lo de mismo generalmente termina en resultados mediocres que sólo alegran a quienes ciegamente siguen y creen en un profeta como camino de vida.

Si los toreros dan toro de regalo, pues yo daré tres líneas de regalo para no dejar pasar un hecho importante. Desde acá y a título personal quiero dar mis más sinceras felicitaciones por su carrera al Picador de Toros Bravos Diego Ochoa, quien puso hoy final a la misma de manera digna y con honores. Que disfrute del merecido descanso y se vaya con la cabeza en alto por el deber cumplido.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Medellín, Colombia. Cuarta de la feria de la Macarena. Corrida de toros. Tres cuartos de plaza.

Toros de Santa Bárbara, Achury Viejo y Ernesto Gutiérrez.

Sebastián Castella, (en solitario) Palmas. Ovación tras petición. Silencio. Oreja. Oreja. Silencio. 

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.