Juan de Castilla: “Baltasar Ibán me transmite emoción, me gusta la exigencia del hierro”

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO

Juan de Castilla selló una doble tarde en San Isidro importantísima, lo que le valió para anunciarse en verano en numerosas novilladas picadas sobre todo al otro lado de los Pirineos. Ahora, el novillero colombiano afronta citas de importancia: cumplió con creces en Calasparra, le espera su vuelta a Arganda del Rey pero, sobre todo, por delante tiene una novillada con el hierro de Baltasar Ibán este domingo en Villaseca de la Sagra en la que hará el paseíllo con Alejandro Fermín y Tulio Salguero. Hablamos con él.

¿Qué supuso esa doble tarde en Madrid en San Isidro y cómo lo acogieron los empresarios?

Las actuaciones en Madrid me han ayudado muchísimo para mi carrera. Han salido muchas novilladas, pero muchas de ellas han sido duras y en éstas no han ido marchando lo bien que esperábamos. Ha sido un agosto y julio complicado, de mucho madurar y aprender y poner las cosas en su sitio. En septiembre llegan Calasparra, Arganda, Arnedo… y los resultados me hacen mucha ilusión. Creo que saldrá bien porque nos venimos preparando mucho para ello.

Todos sabemos la importancia que tiene Villaseca de la Sagra para el escalafón menor, ¿qué te supone personalmente estar acartelado en el Alfarero de Oro?

Siempre me ha hecho mucha ilusión torear en Villaseca. Siempre han sido un referente para mí como novillero .Para torear en esas ferias hay que estar muy preparado, muy mentalizado. La preparación y la ilusión que me hace ir a Arganda, donde he sido triunfador dos años consecutivos, Calasparra donde fui triunfador ya sin caballos y Villaseca de la Sagra. Me ilusionan mucho, al igual que volver a Arnedo, donde salieron las cosas muy bien el año pasado.

¿Y el hierro de Baltasar Ibán? ¿Qué sensaciones te trae?

Maté una novillada de Baltasar Ibán en Arnedo el año pasado. Es una ganadería exigente, brava, y me gustan los toros que me pongan a pensar. Esta plaza de toros me hace mucha ilusión porque es una ganadería agradecida, que cuando se le hacen las cosas bien ella va a más.

En cuanto a Madrid, ¿qué ha supuesto en tu carrera y cuándo quieres volver?

De pasar de ser un novillero normal a pasar a tener nombre. Me encantaría volver a Madrid, estoy con la mente clara, con las cosas clara. En el momento que quieran, iré.