Víctor Barrio se proclamó triunfador de la Feria de Valdemorillo merced a sus tres orejas en la corrida del domingo frente a los toros de Cebada Gago. Lea o escuche la entrevista con Víctor Barrio.
P: Buen inicio de temporada. ¿Hacía falta un golpe de este tipo en la mesa, para que el público volviese a fijarse en Víctor Barrio?
R: Era una oportunidad importante. Llevaba tres años toreando apenas cuatro corridas de toros en pueblos que hacen sus ferias en el mes de agosto y que no tienen mucha repercusión porque en esas fechas hay muchos festejos y aunque haya andado a un nivel satisfactorio, no han tenido repercusión para mí, sin embargo en Valdemorillo, al ser una época de pocos festejos, con todos los medios de comunicación y televisada por Canal Plus, era una oportunidad importante que no podía escaparse y gracias a Dios, salieron las cosas como uno esperaba.
P: Tres orejas, sorteaste el mejor toro del festejo, pero el ganadero puso en valor tu actuación porque fue un toro difícil y que tuvo sus complicaciones.
R: En la corrida hubo toros buenos, con muchas virtudes pero no fue fácil. El primero de mi lote, que hubo un momento en que pensé que estaba reparado de la vista, fue un toro incierto y no me daba confianza ninguna en que embestiría a la muleta, pero a base de tesón, mucho esfuerzo y de querer y firmeza, pude sacarle muletazos por el lado derecho de cierta compostura y conseguí conectar con los tendidos. El sexto tuvo muchas virtudes, sin llegar a tener un trazo largo fui capaz de cogerle los tiempos, la velocidad y la altura y pegarle muchos muletazos que emocionaron a la gente.
P: Como era lógico has logrado la chimenea de platino al triunfador de la feria. Así que, doble enhorabuena.
R: Yo sabía que era una tarde importante para mí. Toda la gente mete mucha presión diciéndote que es un día importante y tienes que dar un aldabonazo que te ponga en el camino y cuando termina la feria te da moral, porque sabes que es un día clave que no se te ha escapado. Ahora sigo preparándome sin saber cuándo va a ser la próxima, pero tengo la sensación de que ha causado impacto en el aficionado y que has gustado.
P: ¿Cómo es el día después de un triunfo? A parte de llamadas de felicitación, ¿llegan llamadas para nuevos contratos?
R: No me obsesiona demasiado. Es obvio que uno está deseando torear y repetir sensaciones como la del domingo en Valdemorillo, pero cuando uno lleva tres años sacrificándose y entrenando todos los días sin saber cuándo va a torear, sale uno a la plaza presionado y los nervios le impiden disfrutar. Ayer si lo pude hacer. Ahora mi obsesión es seguir entrenando y que cada tarde que me vista de torero pueda salir a disfrutarlo y hacer disfrutar a los que sacan una entrada para venir a verme.
P: Habiendo sido uno de los novilleros con mayor proyección choca el maltrato de la tauromaquia.
R: Dicen que mal de muchos, consuelo de tontos, pero me doy cuenta de que son muchos compañeros con buenas condiciones que luchan a diario en el campo y que es una pena que estén toreando tan poco. De todas las formas, tengo que agradecer a esos cuatro o cinco municipios que han querido seguir contando conmigo para sus carteles. Han sido triunfos importantes los obtenidos en sus plazas, pero a priori solo servían para darme confianza en mí mismo y saber que el día que viniese un compromiso mayor podría afrontarlo sin complicaciones y por eso el día de ayer lo afronté con tranquilidad, confiaba en mis posibilidades y gracias a Dios salió todo bien.
P: Esperemos que el triunfo de ayer haya abierto las puertas de Las Ventas para ser un trampolín más, porque todo pasa por Madrid.
R: Hemos tenido conversaciones con la empresa de Madrid, incluso antes de saber que torearía en Valdemorillo, me dieron su palabra de que contarían conmigo, no sabían si podrían ponerme en la feria o sería antes o después, pero creo que después de este domingo, estaremos en San Isidro si la empresa lo estima conveniente.
P: ¿Ha servido para cargar las pilas de ilusión y de afición para seguir adelante?
R: Me ha llenado de ilusión pero también de mucha responsabilidad. Cuando uno ilusiona a los aficionados y te escriben diciéndote que les ha gustado tu actuación y que quieren verte otra vez, uno quiere mantener ese nivel y pulir cosas día a día. La dimensión de Valdemorillo ha sido importante. Me gustaría mejorar cada tarde, porque soy consciente de que soy un torero que en los últimos cuatro años ha toreado doce corridas muy espaciadas y necesito quizás un rodaje para hacer el toreo rotundo y profundo que a mí me gusta. Quiero entrenar porque cuanto más ilusiona uno, menos puede fallar y más preparado tiene que salir.
P: Sobre todo hace falta que las ferias no sean de Sota, Caballo y Rey.
R: Si, porque yo creo que lo que más ilusionó a la gente, es que se habían olvidado de mí, era una cara nueva y fue una sorpresa. A la salida me preguntaban cuál era la próxima porque quería ir a verme y me dolía contestar que no tenía nada más y no que no se si volveré a torear. Espero que las empresas se hayan ilusionado igual y cuenten conmigo para sus ferias que es para lo que me estoy preparando.
P: ¿Ha habido llamadas para contratarte?
R: Han sido muchos los ganaderos y amigos que me han llamado y me han escrito mensajes muy bonitos para felicitarme, pero con las empresas no he tenido el gusto de hablar con ninguna, pero sé que tarde o temprano contarán conmigo.
P: ¿Debe dar la fiesta un cambio radical?
R: Son muchos los toreros que pensamos que no hace falta tanto cambio. Simplemente hay que concienciarse de que cuando uno da un toque de atención y pide paso, hay que darle las oportunidades, si luego las aprovecha o no que dependa de él. Antiguamente los carteles se hacían de una semana para otra con los toreros que tuviesen más interés y la gente iba con agrado a las plazas. Hoy en día si el aficionado ve que un torero triunfa y no le ven entrar en otras plazas y repiten a toreros que ya tienen más vistos, se molestan porque entienden que no se les tiene en cuenta.
P: ¿Tienes apoderado?
R: Sí. Pablo González ha estado conmigo desde que empecé sin caballos, aunque haya habido épocas en las que estuvo más desvinculado y tuvo que poner a otras personas porque por motivos profesionales no pudo estar el mismo, ha sido una persona que siempre ha estado a mi lado y ha sido una persona clave en estos años que he toreado poco, que ha estado confiando en mí y dándome ánimo.
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